La Policía Local realizó el control de alcoholemia al hombre de 36 años por presentar evidentes síntomas de embriaguez.
En la finca se encontraba un caballo, una yegua y un perro en un estado de salud lamentable, teniendo que ser el caballo sacrificado al encontrarse sufriendo y en un estado irrecuperable por llevar tres semanas sin comer ni beber.
Tan solo tres días después del primer quebrantamiento, el autor volvió a arrancarse la pulsera de control telemática.
El Juzgado de lo Penal de Palencia impone a cada un de los acusados, de 67 y 73 años, una pena de dos años por un delito de lesiones con instrumento peligroso.
Los hechos se produjeron durante los meses de noviembre y diciembre de 2023 en las localidades de Tabanera La Luenga y Escarabajosa de Cabezas.
El hombre había protagonizado anteriormente varios incidentes en el mismo local, incluyendo amenazas de muerte a los ‘puertas’.
La víctima tiene que ser intervenida quirúrgicamente para realizar la extracción del perdigón que había quedado incrustado en su rostro.
El conductor profesional fue detectado durante la realización de un control en la autovía.
Al presunto autor le constan numerosos antecedentes por hechos delictivos semejantes.
El detenido vendía las conservas de manera directa al menos a una fábrica conservera y también en puestos de mercadillos populares.
El arrestado es un varón reincidente de 54 años de Salamanca.
El Juzgado de Instrucción da un plazo de diez días al fiscal y a las partes para solicitar apertura de juicio oral o el sobreseimiento de la causa o, excepcionalmente, la práctica de diligencias complementarias.
El detenido había cometido robos similares en localidades de Castilla La Mancha, Madrid y Zaragoza.
También fue denunciado por tenencia de sustancias estupefacientes.
Tras el robo, uno de ellos huyó a pie, siendo interceptado por los policías y al otro se le localizó tratando de ocultarse en el interior de su vehículo.
El hombre empujó a una trabajadora y la tiró al suelo, al ocasionarle un corte en un dedo por el que tuvo que ser intervenida.
Una discusión laboral desencadenó la agresión y la víctima requirió la colocación de grapas en la cabeza y sufrió rotura de prótesis dental.
Los hechos tuvieron lugar en el exterior de un establecimiento hostelero de la capital palentina.
Varias mujeres se concentran a las puertas de la Audiencia de León para mostrar su apoyo a Raquel Díaz en el comienzo del juicio por los hechos ocurridos en mayo de 2020.
Se negó a someterse al control de alcoholemia.