La infraestructura, clave para luchar contra la despoblación, da servicio, sobre todo, a vecinos de zonas rurales que carecían de conexión o que, de tenerla, era de escasa calidad.
Ejecutivos de Adamo, la empresa instaladora, se reúnen en Peleagonzalo con la secretaria de Estado de Telecomunicaciones, el subdelegado del Gobierno y el alcalde del municipio para hacer balance del despliegue, cuya primera parte fue ejecutada con dos meses de antelación.
La compañía ha desplegado servicios de fibra y de televisión en 141 nuevos municipios de la Comunidad.
Se estima que, una vez finalizados los despliegues programados por los dos operadores beneficiarios, un 90% de la población de Castilla y León tendrá acceso a Internet con una velocidad de más de 100 megabips por segundo (Mbps)