Ecologistas Zamora y Zamora Viva denunciaron hoy la “constante mortalidad” de fauna silvestre, especialmente, jabalíes, corzos, zorros y tejones y “algún perro” que caen al interior de los canales de riego de Toro (Zamora).
“La antigüedad de estas instalaciones gestionadas por la Confederación Hidrográfica del Duero y la ausencia de rampas de escape y vallados perimetrales convierten a estas infraestructuras en trampas mortales para decenas de vertebrados y suponen un riesgo para la ciudadanía”, señalaron fuentes de Zamora Viva.
“Desde el pasado lunes, varios ciudadanos han alertado de la aparición de un jabalí vivo al que le resulta imposible escapar del canal Toro-Zamora a su paso por Toro. Algunos testigos han informado al 1-1-2, a la Consejería de Medio Ambiente y a la CHD para alertar de esta situación y buscar la colaboración de las instituciones para rescatar al jabalí”, explicaron.
Entretanto, vecinos de Toro aportaron alimento para evitar la muerte del animal por inanición pero, “tras cuatro días, sigue en la zona en la misma situación”, según indicaron.
“Este nuevo episodio pone en relieve un grave problema enquistado desde hace años en la zona. De hecho, cada temporada, son numerosos los jabalíes, corzos, zorros, tejones y algún perro que caen al interior de los dos canales de riego que atraviesan la zona. Unos mueren ahogados tras ser arrastrados por la corriente”, denunciaron.
“Cuando estas infraestructuras están vacías de agua, algunos jabalíes fallecen por inanición tras permanecer semanas sin poder sortear las altas paredes. Además, en el intento de superar los muros del canal -de hormigón, muy inclinados y, habitualmente, tapizados de verdín-, las pezuñas de estos ungulados resbalan constantemente, lo que genera con frecuencia graves daños y heridas”, añadieron.
El Canal Toro-Zamora, de unos 60 kilómetros, y el Canal San José, de 51 kilómetros, son infraestructuras construidas antes de 1965 y “están obsoletas” en cuanto a medidas correctoras para la fauna.
Las organizaciones ecologistas recordaron que, al carecer de estructuras de escape para la fauna, los canales de riego provocan desde hace décadas una “constante mortalidad y fragmentación del hábitat” para muchos de los mamíferos de la zona y exigieron “medidas correctoras” para solucionar el problema.
De esta forma, anunciaron que solicitarán información a las comunidades de regantes de ambos canales, a la Confederación Hidrográfica del Duero y al Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico y que estudian medidas legales para “buscar responsabilidades” ante un “grave” problema “que se solucionaría con la instalación de rampas, materiales adherentes y zonas de escape en los laterales o en los sifones de estos canales”.
Por último, recalcaron que la situación descrita “vulnera algunos preceptos” recogidos en leyes o disposiciones de carácter general, como la Ley 42/2007, de Patrimonio Natural y Biodiversidad y la Ley 26/2007, de Responsabilidad Medioambiental. “La situación de muchos canales de riego de nuestro país entraña, además, riesgos de ahogamientos para niños, personas adultas y también para el ganado”, concluyeron.