Santiago Villarino Matellán, párroco de Villárdiga, Cerecinos de Campos y Cañizo, del arciprestazgo de Benavente-Campos, vivió en Perú durante 25 años, diez de ellos, de estudios en el Callao y otros quince de ministerio en el Seminario de Piura, donde fue rector durante ocho. En la última etapa de sus años en Perú, conoció a Robert Francis Prevost Martínez, quien fue elegido ayer como nuevo Papa, bajo el nombre de León XIV.
El actual Papa sirvió en Chiclayo, Trujillo y Piura desde 1985 hasta 1986 y desde 1988 hasta 1998, como vicario parroquial y profesor de seminario, entre otras funciones.
Asimismo, fue prior general de la orden de San Agustín desde 2001 hasta 2013 y, en 2015, el papa Francisco le nombró obispo de Chiclayo y desempeño ese cargo hasta convertirse en cardenal, en 2023.
Fue en ese último período cuando Santiago coincidió con Robert Prevost. El sacerdote zamorano, que estuvo más de 20 años como misionero en Perú, explicó, en declaraciones a la agencia ICAL, que el actual Papa fue su obispo en el Callao, la diócesis a la que pertenece Santiago aunque, en la actualidad, esté ‘fidei donum’ (‘don de la fe’) en la diócesis de Zamora.
El cura zamorano conoció al actual Papa en 2020, cuando este fue nombrado administrador del Callao, una ciudad portuaria localizada en la provincia que lleva el mismo nombre, en el centro de Perú, a unos quince kilómetros de Lima.
Actividad pastoral
“Tuve un encuentro personal con él en la arquidiócesis de Chiclayo, en la que interesó por mí porque yo estaba, en aquel tiempo, realizando mi actividad pastoral en la diócesis de Piura y él quería saber por qué me encontraba trabajando en otra diócesis”, explicó Santiago Villarino a Ical.
“Se puso muy contento el saber que éramos varios sacerdotes del Callao que estábamos trabajando fuera de la Diócesis, al servicio de la Iglesia, especialmente, en un seminario, en el seminario de la diócesis de Piura”, añadió.
El párroco del arciprestazgo de Benavente-Campos expresó su felicidad por saber que el cardenal Prevost fue elegido sumo pontífice. “Estoy alegre porque el Espíritu Santo me va precediendo, me va poniendo signos en los que voy conociendo a los diversos papas. Conocí personalmente al papa Francisco”, indicó.
“Ahora, tengo la suerte de haberlo conocido antes de que fuese nombrado Papa, en aquel entonces, monseñor Prevost, y lo veo como un signo del Espíritu Santo que me va precediendo en mi ministerio al servicio de la Iglesia. Estoy contento por eso y porque me hace este regalo en este tiempo de Pascua”, aseguró.
“Pastor muy cercano”
Villarino comentó reconoció que mucha gente le ha preguntado cómo es el nuevo Papa, a quien calificó de “pastor muy cercano y muy preocupado por la evangelización, por darse al pueblo”.
“En 2020, había un problema en Perú, ya que estaban llegando muchos inmigrantes venezolanos por la situación de Venezuela. Pasaban por Colombia y por Ecuador y buscaban un mejor nivel de vida, llegando a Perú e, incluso, a Chile. Él se encargó de acogerlos y organizarlos por las parroquias, en conjunto con la diócesis de Piura, en la que yo me encontraba”, relató.
“Él se dedicó a organizar los grupos de personas, que llegaban por miles. Una experiencia de ver que se preocupaba por el pueblo que se acercaba a la Iglesia pidiendo ayuda. Tiene ese don de ser pastor”, rubricó.
Casualidad
Santiago Villarino hizo hoy estas declaraciones a ICAL, cuando ya había embarcado en un avión con destino a Roma, aunque no para encontrarse con el nuevo Papa, sino para participar en una peregrinación a Loreto. “Ya desde hace tres meses, tenía prevista una paregrinación a Loreto. Ha coincidido con el cónclave. Ha sido todo sorpresa que coincidiera este viaje con la elección y, también, saber quién ha sido elegido como nuevo Papa”, reconoció.
“El Espíritu Santo lo irá llevando ahora al Gobierno de la Iglesia. Lo vivimos a impulsos del Espíritu Santo, que es el que nos da la luz en este tiempo, en este año especial de Jubileo de la Esperanza. Yo tengo la esperanza de que va a ser un buen Papa”, agregó.
Santiago restó importancia a las preguntas sobre si Robert Prevost será un papa renovador, si seguirá la línea marcada por su antecesor, el papa Francisco, y recalcó que “eso lo decidirá el Espíritu Santo, si se lo inspira” y apostilló: “Yo no puedo hablar por él. Solo puedo decir lo que vi en aquel encuentro que tuve, un encuentro de jóvenes en el que vi a un obispo preocupado por sus sacerdotes, por el pueblo y al servicio del pueblo, una persona cercana, amable, afable y al servicio de la Iglesia”.