Caja Rural de Zamora presentó hoy el convenio de colaboración renovado, para la temporada 2024-2025, con el Club Baloncesto Zamora, que “merece el esfuerzo” de la cooperativa de crédito, no solo por los resultados obtenidos por el primer equipo, sino también para promover el deporte base.
El director general de Caja Rural de Zamora, Cipriano García, aseguró: “Para nosotros, es una enorme satisfacción y un orgullo poder colaborar en un proyecto tan interesante. Hablar en Zamora de baloncesto es hablar de De Luz, además de que tiene otras actividades empresariales de éxito”.
“Tengo recuerdo del baloncesto en Zamora. He visto a Gerardo siempre involucrado, como jugador -que era un jugador notable- y ha sido capaz de mantener la antorcha muy alta en el baloncesto. El summum fue el año pasado, cuando consiguieron el ascenso”, añadió, en referencia al presidente del Caja Rural CB Zamora, Gerardo Hernández de Luz.
En este contexto, Cipriano García insistió en que el CB Zamora, su presidente y la afición zamorana “merecen la colaboración y el esfuerzo” de la cooperativa de crédito. “La saga De Luz no acaba con él, sino que vemos tiene una continuidad. Esta provincia necesita generación de ilusiones”, recalcó.
“El baloncesto es una parte importante y, aunque el sponsor va dirigido inicialmente al equipo profesional, vamos a acometer también la aportación al baloncesto base, para que niños y niñas tengan un referente lo más alto posible”, expuso.
Por su parte, el presidente del CB Zamora, Gerardo Hernández, valoró que Caja Rural de Zamora “esté con todos los proyectos” y reconoció que “no es fácil distribuir un único pastel entre tantos comensales”, en alusión a los apoyos que la cooperativa de crédito brinda a multitud de entidades y asociaciones de la provincia. “Tienen que tener verdaderos problemas a nivel interno para repartir y dar con un criterio profesional valor a los proyectos. Siempre nos pensamos que lo nuestro es lo mejor”, indicó.
“Las ilusiones venían de lejos y nos faltaba algo importante, en cuanto a los compromisos de la gente. Ha habido una especie de equilibro en los astros y ha ocurrido de todo en un mes. Venimos ya de la Copa. Tuvimos la suerte de estar arriba. No estábamos ni entre los diez mejores presupuestos, lo que quiere decir que, en el deporte, muchas veces, dos más dos no son cuatro”, comentó.
El presidente del CB Zamora hizo hincapié en que el club deportivo ha pasado de menos de 200 socios a 850, en la actualidad. “Es algo importante y está bien para empezar pero tenemos que luchar a muerte todos porque, a medio plazo tiene que haber un nuevo pabellón. La pata del abonado está limitadísima y, si viene el Valladolid, que venían mil personas, a lo mejor tenemos que dar cien entradas porque no tenemos más”, lamentó.
“Eso es un hándicap. Los equipos que tienen este tipo de pabellones están muy limitados. En un pabellón que tiene un aforo de diez mil personas puedes dar gratis los carnés a los niños, por ejemplo. Es un tema del Ayuntamiento, que pensamos que estará acorde con las circunstancias”, subrayó.
El presidente del CB Zamora insistió en “es un momento de agradecer a los abonados que han respondido a muerte” y reiteró que “las cuatro patas” en las que se sustenta el proyecto del club son Caja Rural de Zamora, las instituciones, las empresas y los aficionados.
“Los aficionados sienten pertenencia a algo y están emocionados con su equipo. Quiero dar unas palabras a este aficionado que va a estar en el Ángel Nieto, que queremos que la fiesta de los dos playoff y de la Copa sea cada partido pero hay que educar en que hay que estar al partido como fiesta y que la canastita que entra no sea determinante para que tus sentimientos y emociones desaparezcan, porque eso sí que es grave”, advirtió.
“El presupuesto va a ser de los ocho últimos pero el año pasado no era de los diez primeros de LEB Plata. Este presupuesto está para competir por tres plazas de descenso y yo estoy convencido que lo sacaremos. El presupuesto no es alto pero tampoco es bajo”, concluyó.