Un décimo de Lotería Nacional conmemora el Jueves Santo los 500 años del Cristo de la Agonía Redentora de Salamanca
Loterías y Apuestas del Estado dedicará el décimo de Lotería Nacional del próximo 17 de abril, Jueves Santo, al quinto centenario del Cristo de la Agonía Redentora, la imagen más antigua que procesiona en la Semana Santa de Salamanca.
Dicho décimo fue presentado hoy por la concejala de Relaciones Institucionales, Tradiciones y Festejos del Ayuntamiento de Salamanca, Carmen Seguin, el hermano mayor de la Real Cofradía Penitencial de Cristo Yacente de la Misericordia y de la Agonía Redentora, Roberto Sánchez, y el delegado de Loterías en la provincia, Arturo González, quienes estuvieron acompañados por representantes del cabildo catedralicio de Salamanca y por el tesorero de la Junta de Semana Santa salmantina, Fernando Pérez Pena.
Esta imagen de Cristo crucificado es una talla anónima del siglo XVI, atribuida a Juan de Balmaseda hacia 1525. Se venera en la Catedral Nueva de la ciudad y cuenta con la particularidad de ser una imagen de Jesús con peluca de cabello natural donado por dos cofrades. Sale en procesión en la medianoche del Jueves Santo, junto con el Cristo Yacente de la Misericordia.
“Como empresa pública, Loterías está firmemente comprometida con la difusión del arte y la cultura, en especial en aquellos casos en los que la tradición ha convertido a esas expresiones artísticas en auténticas señas de identidad que nos definen y nos cohesionan como sociedad en torno a una historia y unos valores comunes, que Loterías comparte con el conjunto de la ciudadanía”, manifestó el delegado de Loterías en la provincia, Arturo González.
El origen del Cristo de la Agonía Redentora es desconocido, aunque se sabe que procede del convento de Santa Isabel, donde permaneció hasta la medianoche del 30 de marzo de 1836, Miércoles Santo, fecha en la que las monjas lo depositaron de manera clandestina en la Catedral de Salamanca para librar a la talla de la desamortización de Mendizábal.
El 5 de mayo de 1984 se funda en Salamanca la Real Cofradía Penitencial de Cristo Yacente de la Misericordia y de la Agonía Redentora, que rinde culto a esta imagen de Jesús Crucificado. Casualmente, la Cofradía procesiona en la madrugada del Jueves Santo, fecha en la que el Cristo fue trasladado del convento a la Catedral.