De izquierda a derecha: Arturo Alfaraz, Javier de la Iglesia y Andrés Ferrero, en un momento de descanso de su misión en Valencia.
¿Qué aprendimos de La Sociedad de la Nieve? Que la supervivencia ante una catástrofe se sustenta en la solidaridad, la empatía y la humanidad. El relato sobre la tragedia de Los Andes tira por tierra esas otras expectativas establecidas en historias como El señor de las moscas, donde los individuos se vuelven crueles en circunstancias extremas. El caso es que en esta última semana estamos asistiendo a un ejemplo que borra esa mezquindad humana novelada y valida la primera de las teorías: nos necesitamos los unos a los otros para salir adelante.
OLA DE ALTRUISMO
Por desgracia, en esta ocasión no es posible ampararse en la seguridad que nos proporciona la ficción, puesto que la experiencia angustiante, cruel e incómoda de la que hablamos es real. Esta vez no se trata de efectos especiales, sino de afectos especiales. Y es que, la Dana, que ha atacado sin piedad al Levante español, ha propiciado una ola de altruismo que pisa y pisa el acelerador emocional sin tregua. No falla; si cierras los ojos frente a un mapa de España y eliges cualquier lugar al azar, encontrarás a más de un grupo de voluntarios arrimando el hombro en favor de los damnificados.
DE ARCENILLAS A PATERNA
Hoy detenemos nuestro dedo índice en Arcenillas, el pueblo zamorano en el que arranca esta historia solidaria coral que ha involucrado a otras zonas de la provincia. El ideólogo de esta iniciativa (puro corazón) no es otro que Javier, alma mater del taller Electromecánica De la Iglesia, quien pensó en poner en práctica aquello de "grano a grano hace granero" (así lo resume el propio Javier) para ayudar a los afectados sumando fuerzas. Ese deseo que brotó un viernes por la noche era ya una realidad el sábado por la mañana.
CADENA SOLIDARIA
Todo ocurrió de la manera más espontánea, del modo en que lo hacen esas publicaciones que se vuelven virales: "Se lo comenté a varios amigos, a compañeros de empresas de alimentación, y ellos, a su vez, llamaron a otros...", nos cuenta. Por el camino, se unió también el Ayuntamiento de Arcenillas, quien "se movilizó a través de las redes sociales" para encontrar vecinos que quisieran contribuir, empresas como Gaza, Atanes, García Ferrero, Innova Chef, Quesos Revilla, Congelados Clavo o "la Asociación de Ganaderos y Agricultores".
Esta última agrupación ya había apilado por su cuenta (en Fuentesaúco) diverso material para los perjudicados de una tragedia rodeada de indignación y desconcierto. Hablamos de artículos que finalmente alcanzaron su destino junto a los productos recopilados con la iniciativa del mecánico de Arcenillas (palas, pañales, linternas, cepillos, ropa de abrigo, productos de higiene, latas, leche en polvo, mascarillas...). "Ellos disponían de transporte, pero el nuestro es más rápido, asi que también hemos llevado ese material", explica Javier.
UNA ONG AMIGA
Lo hace desde el mismo tráiler en el que, horas antes, viajaban esos palés con artículos de primera necesidad que ya están donde tienen que estar: en Paterna. "Una pequeña ong con la que contactamos a través de las redes sociales será la encargada de distribuirlo todo desde allí a pequeños pueblos de la zona donde no llega nada". En el mismo vehículo va Arturo Alfaraz, de Alfaraz Motor. Mientras, en su propio camión viaja Andrés, de Andrés Ferrero Hijos, que ha colaborado con el transporte "y con palés de congelado".
"HAY QUE HACERLO"
Los tres se han ausentado de sus trabajos estos días, con lo que esta decisión conlleva siendo autónomos, pero "somos personas y hay que hacerlo", aseguran convencidos después de toparse de cerca con un dolor que encoge el corazón. "Nosotros hemos visto la zona exterior, no nos hemos metido en la más problemática. Aquello impresiona, así que no podemos llegar a imaginar lo que puede ser de verdad el panorama dentro", expone Andrés. "Fíjate", toma la palabra Javier, "el coordinador de la ong nos decía que él había estado en la Guerra de Ucrania y que la situación no era muy distinta aquí". El organizador les explicaba también que los artículos que necesitaban ahora con más urgencia son "carretillas, palas o cepillos", elementos que "nosotros llevábamos".
UNA SEGUNDA SALIDA
Como imaginas, los voluntarios de este polígono en el que descargaron despidieron emocionados a estos tres zamoranos que destacan la ejemplaridad de los particulares en este estado de shock permanente y denuncian "los saqueos que también se han producido en estos días".
Puede que esta no sea la primera visita zamorana a este emplazamiento: "Se baraja una segunda salida de camioneros e incluso de la propia Asociación de Agricultores y Ganaderos, que quieren acudir personalmente", nos desvelan mientras prosiguen con su viaje de vuelta. Son tres en la carretera, pero en ese asfalto, les acompañan, no de manera física, pero sí emocional, cientos y cientos de zamoranos, como en 'Bonito', aquel videoclip de Pau Donés que inspiró a Alanis Morissette y que resaltaba, entre otras cosas, la importancia de la gente valiosa y buena, de la gente como Javier, Arturo y Andrés.