A partir de este domingo, la venta de perros, gatos y hurones en tiendas de animales será ilegal en España, tras la implementación de la Ley de Protección de los Derechos y el Bienestar de los Animales. Esta medida tiene como objetivo reforzar el control sobre la venta de mascotas y mejorar las condiciones de bienestar de los animales, poniendo fin a su comercialización en tiendas físicas.
La ley, aprobada el pasado año, otorgaba a las tiendas un plazo de 12 meses para ajustarse a la nueva normativa, que prohíbe tanto la venta como la exhibición de estas especies con fines comerciales. A partir de ahora, solo los criadores registrados podrán vender perros, gatos y hurones, bajo estrictas condiciones sanitarias y legales.
La normativa también introduce un sistema de registro obligatorio para todas las transacciones de venta, que deberán ser comunicadas en un plazo de tres días hábiles, además de exigir que los animales sean entregados en óptimas condiciones de salud. Las sanciones por incumplir esta ley pueden llegar a los 200.000 euros, lo que refleja el compromiso del gobierno en la lucha contra el comercio irresponsable de animales.
Con esta medida, España sigue la tendencia de otros países europeos que han adoptado políticas más estrictas sobre la venta de mascotas, buscando prevenir el maltrato animal y fomentar la adopción responsable.