Descartadas nuevas medidas para abaratar la cesta de la compra

Planas pide tiempo porque “el IPC de los alimentos ha tocado ya techo”.
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El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, descartó este lunes que el Gobierno proyecte adoptar, a corto plazo, nuevas medidas para bajar el precio de los alimentos, porque considera que las últimas medidas que entraron en vigor en enero, como la bajada del IVA, están siendo eficaces para contener la escalada, y se confía en haber entrado ya en una “senda de disminución”, porque “el IPC de los alimentos ha tocado techo”.



Planas compareció en rueda de prensa tras presidir el Pleno del Observatorio de la Cadena Alimentaria (OCA), al que convocó con carácter extraordinario este lunes para analizar la evolución del precio de los alimentos y el efecto que ha tenido la rebaja del IVA para alimentos básicos que entró en vigor el 1 de enero.

Tras casi tres horas de reunión con todos los eslabones de la cadena alimentaria, el ministro dijo que, a la vista de la evolución de los precios de producción en los últimos meses y de la “eficacia” de las últimas medidas aprobadas por el Gobierno, como la rebaja del IVA a los productos básicos, “tenemos razones para pensar que el IPC de los alimentos ha tocado techo”.


Indicó que la postura ahora mismo del Gobierno es que con el escenario internacional de reducción de costes de producción y el impacto de las medidas que acordó el Consejo de Ministros el 27 de diciembre, junto a otras posteriores tomadas en enero, ya se está observando una bajada de precios alimentarios, como se vio ligeramente en el IPC de enero, y hay que tener “paciencia” para que la senda de abaratamiento se afiance en los próximos meses.


El ministro advirtió de que la bajada “no se verá en 24 horas” porque, en el caso de los alimentos, la cronología “no es tan inmediata” como la de la energía, donde las bajadas en las materias primas se notan antes en el bolsillo del ciudadano. “La paciencia es una virtud”, señaló el responsable de Alimentación, que advirtió, no obstante, de que habrá que estar pendientes de la evolución de factores como la guerra de Ucrania o la sequía para que estos no alteren las buenas expectativas.


Planas afirmó que le había pedido a los eslabones de la cadena alimentaria en la reunión de este lunes que hagan un esfuerzo para trasladar de manera efectiva la bajada de los costes que se esperan en los próximos meses, y manifestó que encontró una respuesta “positiva y constructiva” en las cerca de 20 intervenciones que se escucharon este lunes.


Reacciones

Tras la reunión, comparecieron ante los medios representantes de las distintas organizaciones que integran el observatorio. Así, el director de la Federación de Industrias de Alimentación (FIAB), Maurio García de Quevedo, valoró del encuentro que “todos hemos estado de acuerdo en que el problema de los precios de los alimentos es por el incremento de costes” de producción y se confía en que “pronto empezarán a estabilizarse”.


Por parte de la Asociación de Distribuidores, Autoservicios y Supermercados (Asedas), Ignacio García Magarzo celebró que el ministro les haya dado “datos muy importantes” que atestiguan que “los costes que están tensionando los precios van a bajar en los próximos meses”. García también concedió peso a que la cadena coincida en el “diagnóstico compartido por todos” de que “estamos ante un problema de costes y no de márgenes”.


Sin embargo, desde las organizaciones agrarias, el presidente de Asaja, Pedro Barato, discrepó de la visión optimista del Ejecutivo y dijo que “todavía queda mucho para poder decir que los costes de producción han bajado”, porque “en términos generales, han bajado ya muy poco para los agricultores y hay determinados costes que han venido para quedarse”. Una opinión similar a la que expresó Andoni García, de COAG.


Por parte de la Asociación de Grandes Empresas de Distribución (Anged), manifestaron en un comunicado el "extraordinario trabajo que a lo largo del último año ha realizado toda la cadena de valor y, en particular, la distribución, para amortiguar y no trasladar por completo al precio final de los alimentos el encarecimiento histórico y desproporcionado de las materias primas, energía e insumos básicos". También valoraron "de forma positiva" las medidas impulsadas por el Gobierno y la "voluntad" de diálogo del Ministerio para solucionar "un problema de enorme complejidad y que depende de factores exógenos a la voluntad del Gobierno y de los agentes productivos".