Todo zamorano asocia el mítico Elefante de Oro al prostíbulo ubicado en la N-122, en la recta de Coreses. La pandemia se llevó por delante este popular negocio, uno de los puticlubs más famosos de toda la provincia de Zamora, que a día de hoy, dejando atrás su pasado, ha dado un giro de 360 grados para convertirse en un negocio hostelero.
Más de medio siglo avalaban al club de alterne, desde 1995, y que la pandemia le llevó a cerrar sus puertas debido a la incertidumbre que esta crisis provocó en todo tipo de negocios. Aunque, casualmente esta nueva etapa que se ha iniciado en dicho emplazamiento es un negocio hostelero, uno de los sectores más damnificados por la situación de emergencia sanitaria.
El cambio es total, el negocio tiene una nueva imagen e incluso nombre, el Hostal 711, aunque será difícil para todos los zamoranos y zamoranas no asociar aquel lugar a su anterior ocupación. El Hostal 711 contará con un menú amplio, para todos los públicos y con precios bastante económicos. Su antigua gerente ha afirmado que dicho cambio no ha sido gigante, pero sí se han volcado en dar una imagen más familiar, deshaciéndose de todo los decorados del antiguo hostal en el que ejercían las prostitutas.
Cabe destacar, que hace 6 años, el programa dirigido por la popular periodista Meritxell Martorell, "21 días", se desplazó hasta el prostíbulo, entrevistando tanto a sus trabajadoras como a los clientes que lo frecuentaban, con la intención de conocer el día a día de dicho negocio y hablar sobre temas como los salarios o la prostitución ilegal.
A su vez, se pidió respeto a las mujeres que allí trabajaban mediante un comunicado del propio Elefante de Oro: "Quizás son ellas y sus circunstancias, a veces la vida eligió por nosotras y no hubo la oportunidad de elegir una carrera porque lo esencial era comer y que su gente comiera pero cualquiera de ellas podía haber sido buena esposa, buena empresaria o buena periodista porque la vida les enseñó que lo principal es el respeto, las ganas de luchar y que hagas lo que hagas en la vida, una no se vende, no pierde la dignidad por usar nuestro cuerpo como herramienta sino por cerrar nuestro alma y nuestra mente como seres humanos y pensar que estamos por encima de todo. Orgullosas de nuestro pasado y nuestro presente”, afirmaba dicho comunicado.