IU propone evaluar los efectos del covid sobre la salud mental

Izquierda Unida en Castilla y León llevará mociones a los ayuntamientos de la Comunidad para que haya un debate sobre las carencias de salud mental del sistema público sanitario y planteará medidas para paliar el impacto que el COVID-19 está teniendo en la población, especialmente entre las personas más vulnerables.

En un comunicado, la formación recordó que recientemente la Organización Mundial de la Salud (OMS) alertaba de la interrupción y el deterioro de la atención a la salud mental a nivel mundial y la necesidad de reconducir la situación urgentemente.  

En ese sentido, aseguró que el impacto del COVID-19 y la posterior situación de aislamiento está siendo y va a ser "enorme, tanto en materia sanitaria, como económica y social". "Esta crisis sitúa a la ciudadanía en un escenario de incertidumbre sin precedentes, con elevados niveles de estrés y miedo por la salud y por la vida, además del riesgo de situación de pobreza y exclusión, los cuales afectarán gravemente a la salud mental de la población", añadió. 

Por ello, IU sostuvo que la salud mental ha sido uno de los campos más afectados durante esta pandemia y aseguró que es previsible un aumento de las patologías y un empeoramiento de las ya detectadas. Así, consideró necesario evaluar los efectos de la pandemia en la salud mental, y su traducción en síntomas y malestar psicológico.  

UNA ACTUALIZACIÓN "PERTINENTE"

Además, IUCyL señaló la oportunidad de diseñar e implementar una Estrategia de Salud Mental de urgencia post COVID-19, con el objetivo de adaptar la asistencia en salud mental a los efectos causados por la pandemia, incidiendo en la atención en la comunidad presencial. "Es pertinente actualizar el Plan Estratégico de Salud Mental en Castilla y León, que refuerce el carácter comunitario y público de la atención sanitaria en salud mental, así como el enfoque psicosocial", agregó.

Al respecto, indicó que es preciso asegurar la financiación suficiente del sistema público de salud mental de Castilla y León y de las actividades llevadas a cabo por las asociaciones de familiares y personas usuarias, y detectar las posibles carencias del sistema social y sanitario para planificar y aplicar un sistema de financiación estable para llevar a cabo las mejores políticas públicas en este sentido.

Finalmente, la formación defendió reforzar la salud mental en el ámbito de la Atención Primaria y la comunitaria especializada, y garantizar la presencia de profesionales de la salud mental tanto en centros residenciales para personas mayores, como en los centros educativos.