Fallece la actriz Verónica Echegui a los 42 años

​Saltó a la fama con Yo soy la Juani en 2006, y desde entonces construyó una sólida carrera en cine y televisión.
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Echegui


Verónica Echegui, una de las actrices más reconocibles del cine español reciente, falleció este domingo a los 42 años, según han confirmado fuentes de su entorno a El Mundo. La intérprete madrileña se encontraba ingresada en el Hospital 12 de Octubre de Madrid debido a una enfermedad.


Aunque su carrera artística había comenzado algo antes, fue en 2006 cuando Verónica Echegui se convirtió en un rostro inolvidable gracias a Yo soy la Juani, la película de Bigas Luna que marcó un antes y un después en su trayectoria. Aquella escena final, con su personaje subiendo a un tren mientras le suplicaban desde el andén, quedó grabada en la memoria colectiva. Allí, entre lágrimas y determinación, nació definitivamente la actriz que ya intuía desde niña que ese sería su camino.


Verónica Fernández de Echegaray —su verdadero nombre— pertenecía a una familia con fuerte tradición intelectual y artística, entre cuyos miembros figuran el Nobel José Echegaray y el dramaturgo Miguel Echegaray. Desde muy joven supo que su vocación era la interpretación, y tras finalizar el instituto ingresó en la Real Escuela Superior de Arte Dramático (RESAD).


Bigas Luna, descubridor de talentos como Penélope Cruz o Javier Bardem, la eligió entre 3.000 aspirantes para dar vida a La Juani, una joven de barrio con sueños de libertad y éxito. Vestida con un chándal amarillo del Bershka, Echegui logró hacer suyo un personaje que representó a toda una generación. Con su fuerza, vulnerabilidad y carisma, convirtió a La Juani en un símbolo de empoderamiento en medio de un entorno hostil.


Su última aparición en pantalla fue en febrero de este año, en la comedia romántica A muerte, dirigida por Dani de la Orden para Apple TV+. Pero más allá de sus papeles, Verónica Echegui será recordada por esa mezcla única de potencia emocional y autenticidad, por haber encarnado a personajes complejos sin dejar nunca de ser ella misma.