La concejala Ana Belén González explica las actuaciones del Ayuntamiento ante las quejas de los vecinos por el garaje apuntalado junto al pabellón Ángel Nieto

"El Ayuntamiento y su personal técnico ha acompañado, en todo momento, a los vecinos en un problema estructural de su edificio, que podría haber causado una catástrofe si no se hubiera acometido con la agilidad que se ha realizado por parte de todos los implicados", dice.
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Ayuntamiento de Zamora



La concejala Ana Belén González responde a las inquietudes y malestar expresados por los vecinos de los portales de la calle Ángel Nieto y de los números 44 y 46 de la calle Villalpando, afectados en relación con las obras estructurales acometidas en su edificio, y reafirma el compromiso y la diligencia con la que el Ayuntamiento ha actuado en cada fase del proceso para garantizar la seguridad del inmueble y de sus residentes. 


1. Cronología de los hechos y actuación municipal: 

En febrero de 2024, tras una inspección de urgencia realizada por el personal técnico municipal, el Ayuntamiento detectó un problema estructural grave que requería el apuntalamiento inmediato de la fachada y el cierre del acceso al garaje, y posteriormente, el desalojo de algunas viviendas, lo que derivó en la apertura de un expediente de orden de ejecución. 


Desde ese momento, el personal técnico del Ayuntamiento ha mantenido contacto constante con la comunidad de vecinos y ha supervisado cada fase del proceso para asegurar que las actuaciones se desarrollaran en tiempo y forma. En mayo de 2024, la Comunidad de Propietarios presentó una Declaración Responsable de Obras (DRO) para acometer el arreglo de la fachada, en la que se incluía una partida para la reparación del peto sobre el garaje. No obstante al concluir la Comunidad de Propietarios las intervenciones, comunicadas el 5 de septiembre, se solicita al Ayuntamiento el arreglo del peto, en ese momento en un estado de riesgo estructural, indicando que lo dejan apuntalado.


2. Investigación y verificación de competencias municipales: 

Ante la solicitud de los vecinos, en la que señalaban la posibilidad que la zona del peto sea de titularidad municipal, el Ayuntamiento, a través del servicio de Patrimonio, llevó a cabo una investigación exhaustiva para determinar la titularidad de la zona. Si bien ni en el Plan de Urbanismo ni en el inventario municipal figuraba esa zona, ni constaba cesión expresa por parte de la promotora de la edificación y urbanización del entorno, se constató que el peto se sitúa sobre un camino público, el camino del Matadero, lo cual implica su carácter público y la necesidad de intervención municipal. 


El 11 de octubre se solicitó una reunión por parte de los vecinos afectados y dicha reunión, que contó con con la asistencia de personal técnico municipal y de la concejala Ana B. González, se celebró el día 22 de octubre, una vez se tenían los informes del servicio de Patrimonio sobre la titularidad de la zona. En ella, se informó a los vecinos de que el Ayuntamiento asumiría la ejecución de las obras necesarias y se iniciaron los trámites correspondientes de forma urgente, comprometiéndose a resolver la situación a la mayor brevedad posible. 


3. Compromiso del Ayuntamiento con la seguridad y el bienestar de los vecinos:

Desde el inicio de este proceso, el Ayuntamiento ha respondido con celeridad y firmeza, con la ejecución de cada fase dentro de los plazos previstos. Ayer, 11 de noviembre, apenas 3 semanas después de la reunión con los vecinos y dos meses desde la solicitud, ya está firmado el contrato para la redacción del proyecto y adjudicada la ejecución de las obras, que darán inicio de inmediato. Ana Belén González subraya que el equipo técnico municipal ha trabajado mano a mano con los vecinos, atendiendo sus necesidades y velando por su seguridad. 


Añade que el Ayuntamiento y su personal técnico ha acompañado, en todo momento, a los vecinos en un problema estructural de su edificio, que podría haber causado una catástrofe si no se hubiera acometido con la agilidad que se ha realizado por parte de todos los implicados. Sin embargo, el acceso al garaje permanece cerrado debido a la necesidad de asegurar la estabilidad de la zona, tras un proceso de intervención de la comunidad de vecinos que ha requerido siete meses, entre la elaboración del proyecto y la ejecución de la obra.