Mesa navideña ‘made in’ Zamora

Consumir productos de proximidad es una de las claves para impulsar el desarrollo de nuestra provincia; también en estas fechas. Incluir delicias procedentes de esta tierra en la cesta de Navidad pone en valor a nuestras comarcas al tiempo que nos proporciona un recorrido por sabores inigualables.
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Cena de Navidad


Harinas, quesos, chocolates, vinos, embutido… Zamora cuenta con una extensa lista de productos oriundos de la tierra, una auténtica despensa en la que podría sustentarse toda nuestra dieta. También en Navidad, época en la que cualquiera de los alimentos que nacen y crecen en nuestra provincia dan lustre a los desayunos, comidas y cenas envueltos en luces y buenos deseos. Sin duda, una cesta navideña nutrida con productos de esta zona supone un extra a la hora de sentarnos a la mesa.


Por supuesto, no se trata de manjares que encajan únicamente con estas fechas; de hecho, su consumo debe ser extensivo al resto del año, no solo por su calidad, que impacta de modo positivo en nuestra salud. Existen otras razones para optar por una alimentación con sello zamorano. Probar un dulce elaborado con ingredientes de aquí implica caminar del lado de los intereses de nuestra tierra, un lugar con cientos de encantos que merece salir del estancamiento, ganarle el pulso a la despoblación y generar riqueza potenciando cada una de sus credenciales.


Apoyo a agricultores, ganaderos y pequeñas empresas


Pues sí, consumir productos de cercanía es una de las acciones más sencillas que, como zamoranos, podemos efectuar para ayudar a nuestra provincia, y, por ende, a nuestros propios intereses. Adquirir alimentos también denominados de kilómetro cero o de proximidad aporta bienestar a nuestro organismo, ya que el valor de sus materias primas resulta incuestionable. Pero, además, si compramos un queso hecho en Zamora, estamos haciendo mucho más que tomar la acertada decisión de tomar un producto de calidad contrastada. Con el sencillo gesto de llevarnos un trocito de este queso a la boca estamos impulsando el desarrollo de nuestra provincia.


Esta acción implica más que una palmada en el hombro a los responsables de la elaboración de este alimento; supone una ayuda primordial tanto a ganaderos, como a pequeños productores y a cada trabajador de la fábrica correspondiente, por citar solo a algunos de los componentes de una cadena que se extiende por toda la provincia. De esta forma, nuestra colaboración llega a más de un punto, pues el mundo rural al completo se encuentra involucrado en un proceso que se erige como una de las claves para crear empleo y para fijar la población que necesita esta provincia.


Por otro lado, no descubrimos nada si recordamos las dificultades por las que están atravesando estos sectores con el aumento paulatino de precios que afecta a todas las áreas de la cadena alimenticia. Una dificultad que no es cosa de este año, sino que ya arrastramos de temporadas anteriores (avivada también por la pandemia y la Guerra de Ucrania). Claro, que también es cierto que todo esto hace que el precio de la cesta de la compra para los consumidores se dispare, en consecuencia. De cualquier modo, siempre es acertado tener en cuenta todos los puntos de vista y, desde luego, apostar por el producto de proximidad repercute positivamente en la provincia y, como tal, a los zamoranos. Todo lo que podamos contribuir como vecinos de nuestra tierra será bienvenido.


Las ventajas de optar por la gastronomía local


Como vemos, los alimentos de proximidad ponen en valor a nuestras comarcas al tiempo que nos regalan sabores únicos. Ventajas económicas (los beneficios quedan en Zamora), medioambientales (reducen la huella de carbono y la contaminación), gastronómicas (sus sabores son inigualables), saludables (sus ingredientes han sido recolectados en el momento óptimo) … La gastronomía local, pues, es la clave para garantizar un mejor presente, y futuro, a nuestra tierra. Y, como hemos mencionado, la Navidad resulta una época propicia para multiplicar, si cabe, nuestro apoyo a esos pequeños productores y demás agentes implicados que se afanan por confeccionar los alimentos más puros.


Irresistible chocolate para las recetas dulces


Y la lista de estos alimentos puros es generosa. Comenzando, por ejemplo, por el chocolate, una delicia para cualquier momento del día e ideal para esta época del año. Cuando hablamos de estos irresistibles sabores nos viene a la cabeza La Superlativa. Esta marca de peso se asienta en Toro y ofrece placer para el paladar y aromas únicos desde 1870 nada menos. Su nombre, sin duda, hace honor a lo que representa (cinco generaciones a sus espaldas) y un resultado ‘superlativo’.


La omnipresente harina


Grandiosa también es su cascada de opciones, apta para todo tipo de consumidores. Cuenta con chocolates a la taza, chocolate en polvo o chocolatinas, pero también comercializa un chocolate especial para postres sin gluten… La variedad de La Superlativa convierte a sus chocolates en un producto comodín para cualquier instante. Una interesante opción para estas navidades es emplearlo para preparar postres o bollos, así que necesitamos un acompañante: la harina.


En Zamora contamos con una opción ideal: amasar con Alere Vital y contribuir a un mundo más sostenible y saludable. Su harina integral de trigo germinado ecológico, además, es ideal para hacer galletas saladas o masa de pizza casera. Alere cuenta con harinas perfectas para cocinar brownies de chocolate y frutos secos, idóneos para una merienda navideña, pero la marca también dispone de diversas opciones para preparar tacos mexicanos o bolitas de queso con trigo germinado.


Las recetas, como adivinas, son innumerables con este producto que tiene que estar, casi obligatoriamente, sobre el mantel. Otro de los ingredientes necesarios y que casan muy bien con los mencionados chocolate y harina son los huevos.


El básico de los fogones


Para ponernos a los fogones con este básico de la despensa recomendamos acudir a Villalpando. Allí se sitúa la granja más representativa si hablamos de gallinas criadas en libertad. ¿Sabías que fue la primera en Zamora en adquirir el sello ANDA (Asociación Nacional para la Defensa de los Animales)?


La alimentación de las gallinas está basada en cereales, lo que le confiere una gran calidad al producto. Nada que ver con la alimentación que dispensan a sus aves los grandes productores. Los huevos de la abuela, así se denomina esta marca única, te despacha huevos frescos que destacan por su intenso sabor, perfectos para elaboraciones tanto modernas como tradicionales. Una simple tortilla puede resultar una opción maravillosa para tomar un vermú navideño en casa o para preparar un piscolabis a una de las tantas visitas por estas fechas.


Queso Laurus para un aperitivo navideño sobresaliente


Bizcochos, galletas, tartas… Es posible hornear deliciosas recetas utilizando solamente productos de nuestra tierra que cuidan de nuestra salud, pero también del planeta. Por supuesto, también tenemos la suerte de contar con dulces ya elaborados (desde mermeladas hasta pastas, por citar tan sólo dos ejemplos) y que resultan ideales para regalar.


Eso sí, no todo va a ser dulce en Navidad. Zamora también es un buen productor de manjares salados. No podemos perdernos el queso y el chorizo para un aperitivo navideño sobresaliente. Los ganaderos más experimentados son conscientes de que la oveja churra y la castellana se sitúan en el origen de los quesos más potentes de Zamora. Entre ellos, Laurus, que innova con quesos curados de 6 y 14 meses, pero también con surtidos de cremas de queso fundido para una merienda diferente.


Pimentón, ajo y orégano: un aroma aplaudido en Navidad


Sin duda, una marca fundamental que proporciona una textura y sabor únicos para degustar junto a un embutido con carisma: Chorizo Zamorano, cuya producción y elaboración se extiende por toda la provincia. Entre las empresas elaboradoras de este sello se encuentran Embutidos Alfonso (San Vítero), Embutidos del Duero (Valcabado), Embutidos y Jamones Lema (Santibáñez de Vidriales), Cárnicas Díaz de Zamora (Morales del Vino), Hijos de Dionisio Sánchez (Fuentesaúco), Industrias Cárnicas Ele (Roales del Pan), Juan José Ledesma (Zamora) y Melquíades Rodríguez (Coreses).


Su aroma, que recuerda al pimentón, al ajo y al orégano, su textura homogénea y su sabor equilibrado conquistan a los paladares más exigentes. El Chorizo Zamorano, una de las marcas de garantía más señeras y aplaudidas de Zamora (y una de las más reconocidas fuera de nuestra provincia), se encuentra en diferentes formas: sarta, vela, ristra o atado y cular. Cualquiera de estas opciones se considera un acierto. De hecho, deben estar en nuestra despensa en todas las estaciones del año.  


No sin una copa de vino


Chorizo y queso; sin duda, las mejores opciones para un tentempié que podemos acompañar con una copa de vino procedente de bodegas Fariña, uno de lo principales artífices del desarrollo de la D.O. Toro. Más de siete décadas de esfuerzo y tesón son las responsables de un producto con marcada calidad y con carácter.

Sus tintos son estructurados, muy adecuados para la crianza en madera, y presentan una excelente evolución en el tiempo. Los blancos y rosados son afrutados, frescos y de gran intensidad aromática. Todos ellos componen un verdadero muestrario de singularidad y elegancia que mejorarán sin duda, tanto nuestras comidas como nuestras cenas en estas últimas semanas del año 2023.


Y es que, los productos de proximidad no solo hacen felices a trabajadores del campo y productores. También, a nuestros paladares en una época, la navideña, que demanda los mejores alimentos, los de cercanía.