Javier Faúndez: “Sin la Diputación, la mayoría de ayuntamientos entraría en colapso”

"Más trabajo y menos lamentos". Así finaliza nuestra conversación con el presidente de la Diputación. Puede parecer un spoiler en toda regla, pero lo cierto es que la constancia y la dedicación son dos conceptos omnipresentes en esta entrevista desde las respuestas iniciales. Javier Faúndez, alistano de Trabazos, se presenta como un aliado fiel a los alcaldes y como un defensor a ultranza de la institución que preside, vital para que los pueblos de Zamora gocen de mejores servicios. Es su leitmotiv desde los albores de su mandato, que echó a andar hace poco más de dos meses. 

Repasamos con él ese camino incipiente hacia un futuro más provechoso para la provincia, incidiendo en esos asuntos de urgencia para la Diputación. Empezamos por Sodeza...

PREGUNTA.-La Diputación solventará por fin uno de los problemas que han estado en stand by en estos últimos tiempos: Sodeza, que se disolverá y ofrecerá el suelo industrial a los ayuntamientos. ¿De qué manera va a gestionar la institución ese suelo ya utilizable? ¿Cuáles serán los siguientes pasos?

RESPUESTA.- El proceso de disolución se inició el pasado mandato, hace ya, posiblemente, dos años o dos años y medio. Se han tenido que nombrar nuevos liquidadores porque en ese tiempo no se había abordado esa problemática y ahora mismo estamos trabajando para resolver la parte de liquidación. Esperamos que esté resuelta en un horizonte no muy lejano, pero después ¿qué haremos con los terrenos? Pues, vamos a ir por partes. Lo primero es disolver la institución y, después, cuando esos terrenos de Sodeza reviertan en la Diputación, nos sentaremos con los ayuntamientos y miraremos, con lo que nos marque la ley, cuáles son las mejores condiciones para poner ese suelo operativo y que se puedan instalar empresas en la provincia de Zamora.

P.-Otro asunto de necesidad imperiosa para este equipo de Gobierno ha sido la problemática en torno al Ramos Carrión y sus humedades. Tan relevante que se ha acometido esta cuestión desde los primeros compases de mandato elaborando un proyecto de intervención integral. ¿Qué otros problemas que arrastra Zamora del pasado se deben zanjar de manera inminente antes de centrarse de lleno en proyectos encaminados a construir una provincia con futuro?

R.- Nos han entregado el proyecto que encargamos sobre el Ramos Carrión a finales de agosto. Este da una cifra de 169.000 euros, con los que se están haciendo los trámites administrativos. Esperamos llevar este punto al orden del día del próximo pleno para tener resuelto todo antes de fin de año y poder abordar en primavera la reparación de esa terraza. Lógicamente, no puede hacerse en invierno por la climatología. Después, hemos abordado otros aspectos como, por ejemplo, la problemática de los bomberos. 

Poquito a poco vamos resolviendo esos problemas que consideramos que no pueden seguir estando encima de la mesa. Vamos avanzando en otros temas por cada problema que vamos solucionando, pero no quiere decir que por resolver esas situaciones hayamos abandonado la gestión propia de la provincia. De hecho, estamos tratando con una dinámica bastante buena todo lo que es atención a los alcaldes, hemos lanzado el Plan Municipal de Obras, estamos acometiendo carreteras, estamos con muchos proyectos ahora mismo de Fondos Europeos… La Diputación no se ha parado, eso no quiere decir que no hayamos tenido que emplear tiempo para abordar temas puntuales que no nos gustaba que estuvieran encima de la mesa.

P.- Acaba de nombrar a los alcaldes, a los que ha dado voz en este inicio de mandato. Como alcalde que también es, entiendo que es consciente de que nadie mejor que ellos conoce las necesidades de la provincia y de sus territorios en particular. Cuando ha tenido las primeras tomas de contacto con ellos, ¿qué le han transmitido? ¿Cuáles son sus principales preocupaciones?

R.- En primer lugar, han quedado muy tranquilos muchos de ellos porque tenían necesidades de actuaciones. Todos los alcaldes, yo también soy alcalde, siempre tienen esas cosas que hacer en sus pueblos. El Plan Municipal de Obras y el Fondo de Cohesión Territorial (con Diputación y Junta) les dan una cierta autonomía para poder abordar sus proyectos. 

En estos dos meses y pocos días hemos recibido ya a casi 70 alcaldes, así que estamos con una dinámica bastante buena de escuchar esas problemáticas que nos transmiten. A veces son complicadas, a veces no, pero les ayudamos para que puedan desarrollar mejor su labor en cada municipio. La Diputación está, por lo menos en este mandato, para escuchar y para poder abordar los problemas que nos planteen los ayuntamientos.

P.- Hablando de problemáticas, otra de las cuestiones por las que ha estado marcado su inicio de mandato ha sido la contaminación del agua en los pueblos de Sayago. Se han dado soluciones inmediatas, ¿cuáles serán las definitivas? ¿Qué se puede hacer desde la Diputación para que la situación no se vuelva a producir?

R.- En primer lugar, este episodio de contaminación por pesticidas en Sayagua es la primera vez que se da, con lo que nos ha cogido a todos de aquella manera. Sí habíamos tenido un problema hace unos años con trihalometanos y ya en ese momento tanto la Junta de Castilla y León como la Diputación actuaron con un proyecto en la planta de potabilización que tiene la mancomunidad de Sayagua en la zona de la ermita de Gracia. 

Hasta ahí, bien. Entonces, hemos tenido que actuar este verano por una contaminación producida por plaguicidas; ya he dicho que eso nunca se había producido. Hemos tomado las medidas oportunas: la instalación de plantas potabilizadoras, que, por cierto, han estado en funcionamiento apenas una semana porque después las analíticas ya han sido buenas, y el reparto de agua en camiones cisterna, en algibes. Además, hicimos una gestión muy importante con la empresa Aquona para utilizar sus laboratorios con el fin de tener esas analíticas en 48 horas. Ahora, en una reunión que tendremos en breve, debemos ver qué posibles caminos hay para que, si esto se vuelve a producir, tengamos una solución preparada.

P.- Hace mes y algo, hablaba con Víctor López de la Parte y me comentaba que un objetivo claro de su departamento es "conseguir que Zamora sea un destino casi obligado en el calendario vacacional de los portugueses". ¿Qué va a hacer la Diputación de Zamora para conseguir abrirse a otros destinos?

R.- Él te puede hablar mejor de ello, pero te puedo decir que como Diputación estamos haciendo un buen trabajo en materia de promoción turística del territorio. Esta misma mañana (por el martes), he estado hablando con el alcalde de Zamora sobre colaboración institucional y uno de los temas que hemos puesto encima de la mesa, y que ya pusimos en la primera reunión, es el de una oficina de información turística conjunta de Ayuntamiento y Diputación.

P.- Hablando de colaboración institucional, ya ha manifestado la intención de que Fromago celebre su próxima edición y ha comentado también que lo ideal es que todas las instituciones se vuelquen. Ahora mismo ¿en qué punto se encuentra este asunto?

R.- En primer lugar, ¿Fromago se va a hacer? Sí. ¿Se va a hacer de forma diferente? También se va a hacer de forma diferente. De hecho, hemos estado hablando con EILZA, la Escuela Internacional de Industrias Lácteas, y se le ha planteado que lo más operativo y lo más profesional, porque nosotros queremos que esta feria esté profesionalizada, es que, como fundación, lo organicen ellos.

Nosotros nos hemos comprometido a poner 550.000 euros en los presupuestos del año que viene y a cederle espacios o personal para que la feria vaya a buen puerto. Lo siguiente será tener una reunión con el Ayuntamiento de Zamora para ver qué aportación económica va a poner y también qué aportación económica va a poner la Junta de Castilla y León. 

Además, se ha explorado el tema de esponsorizaciones de empresas y también se está trabajando en las cuotas que van a pagar los estands en un futuro para poder instalarse aquí en la feria de Fromago. Todos esos ingresos contribuirán a cubrir los gastos que pueda tener la feria.

P.- Fromago fue una de las estrategias estrella del presidente saliente. La otra fue la Silver Economy. ¿Qué pasos se están dando en este sentido? ¿Pretende la Diputación que este sea otro referente como Fromago?

R.- Estamos dando pasos, pero en estos momentos no puedo informar de nada más. Estamos hablando y trabajando para que esto sea una realidad. Tendremos noticias próximamente.

P.- En esta última respuesta y en las anteriores está implícito el tema que le planteo a continuación: el de la despoblación. De hecho, la Diputación es en sí misma un plan contra la despoblación, pero, a grandes rasgos, y para que los lectores, especialmente los del mundo rural, lo tengan claro, ¿qué otras cosas se van a hacer desde la Diputación, además de los aspectos que hemos tratado en esta conversación, para frenar esta lacra?

R.- En primer lugar, ya lo dije en el discurso de investidura: si tenemos en nuestros pueblos buenos servicios, se puede quedar alguien. Si no tenemos buenos servicios, no se va a quedar nadie. La obligación de la Diputación es ayudar para que los pueblos tengan los mejores servicios; es nuestra principal estrategia, lo que no quiere decir que después realicemos otro tipo de estrategias para que, por inercia, se pueda generar empleo, bien directamente o bien, indirectamente en colaboración con otras instituciones, que también es nuestra línea de trabajo para los próximos cuatro años. Pero si no hay buenos servicios, el resto no nos va a ayudar absolutamente a nada. 

Si no hay buenas comunicaciones… Si las carreteras de la Diputación son competencia nuestra, tenemos que tener las mejores carreteras; si el servicio de abastecimiento es competencia nuestra, tenemos que tener los mejores servicios de abastecimiento; ahora bien, si hay una carretera nacional o una autovía en mal estado, lógicamente eso es competencia de otras administraciones, del Gobierno o de la Junta de Castilla y León, en otros casos.

P.- Hay ciudadanos, y no sólo en Zamora, sino a nivel nacional, que tienen interiorizado un concepto, el que las Diputaciones no sirven para nada, que son administraciones inútiles, un gasto. ¿Qué les decimos a estas personas para convencerles de la importancia de contar con una Diputación en un territorio?

R.- Había una formación política que se llamaba Ciudadanos, que no son los ciudadanos a los que usted se refiere, que ponía en cuestión las diputaciones provinciales, hasta que un representante de Ciudadanos, que fue el señor Requejo, aterrizó en la Diputación y en ese momento se dio cuenta de lo importante que es una Diputación para una provincia con tantos núcleos de población de menos de 20.000 habitantes.

Nosotros, como llevamos gobernando muchísimos años y en muchísimos ayuntamientos, eso ya lo teníamos interiorizado y siempre hemos defendido las diputaciones provinciales. Realmente, hasta que no conoces algo, no te das cuenta de lo importante que es. Lo único que tenemos que hacer es que el presupuesto que tenga la Diputación (a nosotros nos gustaría tener, como a cualquiera, más presupuesto) lo utilicemos con cabeza para prestar los mejores servicios a los pueblos, pero no te das cuenta hasta que llegas a un sitio y tienes experiencia de Gobierno de lo realmente importante que es una institución para una provincia con tantos pequeños municipios como la provincia de Zamora. Lo he dicho desde hace 20 años que soy alcalde: sin la Diputación, la mayoría de ayuntamientos entraría en colapso.

P.- Es el vehículo que da voz a la provincia para que no se quede a un lado.

R.- Sí, además, las diputaciones se crearon para atender a los municipios de menos de 20.000 habitantes, pero, repito, una cosa es predicar desde situaciones demagógicas y otra cosa es cuando llegas a la realidad y te das cuenta de lo que es. De todas formas, antes de hacer algunas aseveraciones, pues se podría preguntar a los que llevamos muchos años en esto; me refiero a los alcaldes.

P.- Al final son los que conocen de primera mano lo que ocurre.

R.- Sí, pero cuando llegas a la política, nunca has gobernado, nunca has estado gestionando, no sabes realmente la importancia de la institución.

P.- Quería preguntarle también por un deseo personal. ¿Por qué quiere que se caracterice su mandato?

R.- Nuestro mandato va a ser un mandato marcado por la colaboración institucional y por intentar forjar dinámicas que sean positivas para los pueblos de la provincia de Zamora y para la provincia. Nuestro ámbito de actuación que viene marcado por ley es el de las poblaciones de menos de 20.000 habitantes, eso no quiere decir que no tengamos que hacer algún tipo de actuación, de colaboración, con el ayuntamiento de Zamora. Pero actualmente trabajamos con una dinámica muy estrecha y activa con la Junta de Castilla y León y vamos a seguir con ella.

P.- Mucho trabajo por delante.

R.- El trabajo aquí no falta. Nuestro objetivo es atender a los alcaldes lo mejor posible, que se sientan cómodos y, lo repito, con nuestro presupuesto, llegar al máximo posible con un criterio de eficacia, eficiencia y transparencia.

P.- Esta provincia cuenta con mucho potencial, pero no siempre se percibe esa realidad más allá de Zamora. ¿Tiene esa sensación?

R.- La provincia tiene mucho más potencial del que pensamos, pero es que la provincia es mucho más de lo que muchas veces decimos. Mucha gente piensa que en las comarcas y en los pueblos no hay nada y hay mucho más de lo que se piensa. Yo voy a muchas comarcas a ver una empresa que abre u otras que están funcionando… Lo que pasa es que en ocasiones se cree que una industria es una multinacional. Para nosotros una industria también es el que tiene una pequeña fábrica de embutidos, el que tiene una fábrica pequeñita de licores donde trabajan, imagínate, cinco o seis personas… Son los que dinamizan la provincia, un autónomo que tiene una empresa de construcción… Hay muchos ejemplos, los agricultores, los ganaderos… Son el tejido productivo de la provincia. 

Una multinacional en la provincia da muchos puestos de trabajo, estupendo, pero ese pequeño autónomo también genera riqueza y empleo y eso también es importante. A veces hacemos reflexiones como que en Aliste o en Sayago o en Benavente no hay nada y hay empresas importantes que generan empleo y riqueza que no son multinacionales, pero para nosotros son importantes.

P.- Mucha suerte en este mandato.

R.- Tenemos que ir sujetando la provincia poco a poco. Siempre lo he dicho: “Más trabajo y menos lamentos”.