El Instituto de Estudios Zamoranos ‘Florián de Ocampo’ falló por unanimidad la trigésima convocatoria de sus becas de investigación, que otorgó a cuatro propuestas en los campos de la Microbiología, la Historia del Arte, la Geología y las Ciencias Ambientales, entre un total de 35.
El IEZ eligió la propuesta de investigación titulada ‘Descubrimiento del potencial genético y biotecnológico de las comunidades microbianas del Lago de Sanabria’, de Zaki Saati Santamaría, doctor en Microbiología y Genética por la Universidad de Salamanca.
El trabajo de investigación propone estudiar los microorganismos del Lago de Sanabria y su diversidad genética, aislar de forma dirigida cepas microbianas con potencial biotecnológico y obtener las secuencias de los genomas de los microorganismos de interés como base para futuras aplicaciones biotecnológicas en diversas industrias, desde a agricultura a la medicina, en la búsqueda de productos que puedan ayudar a mejorar nuestras vidas, nuestra salud y la de nuestro planeta.
Además, eligió la propuesta ‘El escultor Eduardo Barrón’, de Raquel Gallego, doctora en Historia del Arte por la Universidad Complutense de Madrid. El objetivo del estudio es recuperar la figura del artista zamorano profundizando en su conocimiento que, a juicio de la investigadora, es aún insuficiente a pesar de su talento y de haber dejado un patrimonio constituido por obras de gran interés que iluminaron e inspiraron a diversos creadores del primer tercio del siglo XX, ahondando en su formación en la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando de Madrid y en su paso por Italia, especialmente, en las relaciones de Barrón con la Accademia di San Luca y con los pensionnaires de la Villa Medici.
El tercer proyecto de investigación seleccionado fue ‘Contexto y trazabilidad del oro en el yacimiento aurífero de Pino del Oro (Zamora)’, de Santos Barrios, ingeniero técnico de Minas y doctor en Geología por la Universidad de Salamanca. Se busca la caracterización geoquímica del oro primario y secundario del yacimiento arqueominero de Pino del Oro, que permitan avances significativos en el conocimiento geológico de la zona, en la génesis de depósito mineral, en los procesos secundarios que afectan a la mineralización aurífera y en la trazabilidad de material arqueológico, con un estudio de la alta resolución geofísico del sector, según precisaron fuentes del IEZ ‘Florián de Ocampo’.
Además, los resultados extraídos del estudio servirían para mejorar el modelo de prospección de nuevas zonas mineralizadas en el área, contribuyendo al estudio de recursos naturales y su explotación sostenible.
El cuarto proyecto de investigación seleccionado fue ‘Potencialidad forestal natural y situación de los bancos de semillas en los hábitats de la zona del incendio de la Sierra de la Culebra’, de Laura Núñez, graduada en Ciencias Ambientales por la Universidad de Salamanca. Permitirá la creación de un banco de semillas, el análisis de su dinámica para conocer el proceso de restauración natural de las comunicadas vegetales autóctonas, y obtener un mapa de potencialidad forestal del espacio que al diseño de mediadas de rehabilitación ambiental.
El objetivo de la investigación va más allá de un mero análisis de las formaciones vegetales afectadas por el incendio de la Sierra de la Culebra, ya que intentará aportar una alternativa sostenible desde el punto de vista del paisaje forestal, más anclada al territorio, y con una mayor capacidad de resistencia para afrontar amenazas como los incendios de 2022 u otras parecidas derivadas del proceso de calentamiento climático, según las mismas fuentes.