En la comparecencia posterior al Consejo de Gobierno, Fernández Carriedo precisió que será necesario "estar muy atento" ante el "reto" lograr que las llamas no se reactiven, lo que avanzó llevará el trabajo "intenso" en las próximas horas y días, para lograr la extinción completa. De momento, el fuego de Monsagro en la vertiente de la Comunidad ha calcinado 2.500 hectáreas y el de Candelario, 800.
El portavoz quiso reconocer el trabajo conjunto de todos los profesionales que han participado en las labores de extinción, así como a la Unidad Militar de Emergencias (UME), del Estado y la Junta de Extremadura. Además, Fernández Carriedo remarcó la "buena" colaboración entre las dos comunidades y precisó que el presidente de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, y el extremeño, Guillermo Fernández Vara, han estado en contacto "permanente".
Finalmente, remarcó que Castilla y León y Extremadura han trabajado con un operativo "único", en los dos territorios, y tratando que la afectación a la Comunidad fuera el menor.