Valoración de Comisiones Obreras sobre los datos del paro en Zamora

Con los datos facilitados hoy por el Ministerio de Empleo y Seguridad Social, el desempleo baja por cuarto mes consecutivo, se sitúa nuevamente por debajo de la barrera de los 10.000 desempleados en Zamora en 9.625 personas desempleadas, baja en 371 personas respecto al mes de mayo y 1.798 menos que el año anterior. Zamora sigue reduciendo su número de desempleados al igual que en Castilla y León y en España que se consolida en la misma línea. Analizándolo por sexos, siguen las mujeres con 5.442 desempleadas, un 56,5% es la tendencia mayoritaria frente a los 4.183 hombres y los menores de 25 años son 660. Baja en todos los sectores el número de demandantes de empleo al igual que en sin empleo anterior. 

En cuanto a la contratación, aumenta el número de contratos en 245 más que en mayo, y la contratación indefinida sigue siendo un dato positivo, aumentando en 1.146 más que el año pasado cuando no existía la normativa laboral existente que está tendiendo a conseguir la estabilidad en la contratación y se sitúa en 31,36%; la reforma se está consolidando como la herramienta contra la precariedad. Mirando los datos en las prestaciones, reiterar que son muchos los zamoranos que siguen sin tener derecho a una prestación contributiva, solo 2.180 de las 5.661 personas que cobran alguna, y eso con el agravante de que las circunstancias que han provocado el aumento de la inflación no cambian. 

Desde CCOO valoramos positivamente la continuidad de las medidas del Gobierno ya en vigor y las nuevas iniciativas que se incorporan adicionalmente y que deberían mantenerse hasta que la situación inflacionista que está disparando la pobreza y la desigualdad, se modere. No podemos obviar que en nuestra provincia, miles de familias son perceptoras de pensiones no contributivas o del Ingreso Mínimo Vital. Pero también pedimos corresponsabilidad a las empresas en la lucha contra la inflación, la no subida de salarios y la no inclusión de revisión salarial, están deteriorando y va a deteriorar aún más, el consumo de las familias que asumen el coste de la inflación repercutida en los precios de bienes y servicios.