Ahora que empieza el verano ¿Engordan los refrescos Zero? Si y No
La obesidad es una gran pandemia de nuestros días y algunas de las causas principales podrían ser la Coca Cola normal y los refrescos azucarados en general. Es un hecho que nadie quiere abandonar el sabor de estos productos y para ello la industria empezó a introducir los productos Zero azúcares.
Pero, ¿Engordan lo mismo que sus homólogos azucarados?
Si nos dirigimos a la composición nutricional de un bote de coca cola Zero o Light es cierto que no tienen nada de calorías y azúcares mientras que su versión normal posee una cantidad muy alta de los mismos.
Sin embargo, los refrescos Zero lo que si tienen son grandes cantidades de edulcorantes artificiales responsables de copiar el sabor sin añadir calorías.
Si nos basamos en esta información nutricional
1 bote de Coca Cola Zero tiene 0 azúcares
1 bote de Coca Cola Normal tiene 35 gramos de azúcares
Los refrescos Zero serían una opción perfecta incluso en dietas de adelgazamiento porque nos permitirían seguir tomando estos productos con su gran sabor y renunciar a todas sus calorías. ¿De verdad es tan fácil?
Lo cierto es que no y la clave está en esos edulcorantes artificiales responsables del gran sabor. Estos no gozan de mucha popularidad ya que se han relacionado con problemas para la salud por ejemplo en el cerebro, migrañas entre otros aunque es cierto que los estudios afirman que solo lo han producido en muy grandes cantidades.
La Coca Cola Zero no engorda directamente por los motivos mencionados. El hecho es que el cerebro detectará el sabor dulce generando una respuesta similar a la presencia del azúcar generando que se disminuyan los niveles de los mismos como consecuencia de la secreción de insulina causando hambre.
La respuesta a si los refrescos Zero engordan es si y no. Por un lado no engordan directamente ya que no contienen azúcares ni calorías de acuerdo a su información nutricional pero por otro los endulzantes artificiales que contie van a provocar una respuesta en el organismo que produzca un aumento del apetito por un bajón de los niveles de azúcar y al final acabaremos consumiendo lo que pretendíamos evitar por lo que se desaconsejan totalmente en dietas de pérdida de peso