Tras la presentación de la Estrategia regional de prevención del suicidio, Casado apuntó que es conocido que el riesgo de contagio aumenta con el contacto social, sobre todo si no hay mascarilla, algo que ocurre tanto en los restaurantes como en las reuniones familiares. De ahí que pidiera a la ciudadanía un esfuerzo para intentar limitar, "en la medida de lo posible", los encuentros con las familias en lugares cerrados, más allá de la burbuja habitual. "Soy consciente que llevar la mascarilla es una pesadez pero hay que intentarlo por que, a día de hoy, la primera causa de contagio es el brote familiar. Si esto es así en una época en que aún no hay reuniones familiares, es fácil que se incremente de cara a las Navidades", aseveró.
EL EJEMPLO DE AVILA
Pese a ello, la consejera subrayó, según recogió la Agencia Ical, que cabe la posibilidad que la Comunidad se acerque a la "meseta", con la estabilización de positivos de COVID. Puso el ejemplo de Ávila, donde hace unas semanas aumentaron mucho los casos y ahora ha habido una "frenada" tanto en el número reproductivo básico instantáneo (RT) como en la incidencia acumulada de 14 y 7 días. Algo que se puede dar en otras provincias. En todo caso, abogó por la "prudencia" por que es posibles que se vuelva a "disparar" con las reuniones en Navidad.