El centro acoge actualmente a 19 personas de forma estable más las que se encuentran de paso y hace unos 50 menús diarios para llevar. “Desde el fin del estado de alarma, se vislumbra una reducción del número de personas en esta situación. Durante la nueva normalidad ha acudido al centro tan solo un 26 por ciento de personas respecto al año pasado, ya que algunas han tomado la decisión de establecerse en un lugar concreto de manera temporal debido a la situación marcada por la pandemia”, apuntaron las mismas fuentes.
“El número de plazas del centro se ha visto reducido, aunque mínimamente, ya que se requiere desde Sanidad tener tres plazas destinadas a posibles aislamientos por contagio”, precisaron.
Cáritas Diocesana de Zamora expresó su agradecimiento a las asociaciones, grupos, empresas y particulares que han colaborado con donativos en especie y en metálico para apoyar el mantenimiento de la Casa de Acogida, que “ha recibido durante todo este tiempo numerosas muestras de cariño, cercanía y solidaridad”.
La Casa de Acogida de Cáritas de Zamora adaptó durante este período su funcionamiento para respetar todas las medidas impuestas por las autoridades sanitarias y “ha realizado un gran esfuerzo por que nadie se quede fuera”, con el fomento de la ayuda a domicilio, la estancia larga en el centro y otros apoyos sociales.
En este contexto, Cáritas Diocesana de Zamora se ha sumado a la Campaña de las Personas Sin Hogar, que se celebra bajo el lema ‘No tener casa mata’ y con la se pretende “destacar que la vivienda es un derecho humano, necesario para preservar la dignidad de todas las personas”.