La Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Comandancia de Segovia fue la encargada de recuperar la piedra retirada ilícitamente del Acueducto de la capital segoviana y subastada por Internet, que quedó depositada en dependencias de la Guardia Civil a la espera de que, el Servicio Territorial de Cultura de la Junta de Castilla y León y el Ayuntamiento de la ciudad, certifiquen su autenticidad y la procedencia exacta.
La Comandancia de Segovia informó de que detectaron, en fechas pasadas, un anuncio en una red social en la cual una persona ofrecía en subasta una piedra que aseguraba pertenecer al acueducto de Segovia, insertando imágenes de aquella, y su ubicación dentro del citado monumento, iniciando la puja con un precio de salida de 1.000 euros. Igualmente, en la misma página, se anunciaba la venta de granalla de la piedra del acueducto en bolsas de 15 gramos por importe de 49,95 euros cada una de ellas.
De esta manera, se puso en marcha la Operación Pandora, dirigida a la protección del patrimonio histórico nacional, al objeto de contrastar la veracidad del anuncio y poder conocer si la piedra y la granalla anunciada formaban verdaderamente parte del acueducto de la ciudad, considerado como Bien de Interés Cultural (BIC) desde 1884 y declarado como patrimonio mundial por la Unesco en 1985, o si, por lo contrario, se trataba de un falso anuncio con el fin de cometer estafas, se inició una serie de actuaciones de investigación que terminaron con la identificación de la persona que estaba realizando la subasta y la recuperación de la piedra. Fue entregada voluntariamente a los guardias civiles que se la requirieron.
La Guardia Civil reafirmó su “compromiso con la protección del patrimonio histórico, colaborando estrechamente con las administraciones públicas, expertos y sociedad civil para impedir la pérdida de elementos que forman parte del legado colectivo”.