La Guardia Civil prosigue con las labores del búsqueda del menor de 14 años que desapareció el pasado 22 de junio mientras se bañaba en el río Tormes a la altura de la piscifactoría. El joven se encontraba bañándose con un grupo de amigos en una zona no habilitada para el baño con varias pozas naturales.
Los primeros indicios apuntan a que una corriente generada en ese punto del cauce, podría haber arrastrado al menor hacia el fondo de una de las pozas imposibilitando su salida a la superficie. Los padres del joven permanecen en la zona del suceso a la espera, siempre acompañados por los servicios de emergencia, informa Ical.
La alerta se dio sobre las 19.00 horas del pasado domingo, cuando se desplegó un operativo de búsqueda coordinado por la Guardia Civil, con el apoyo de la Policía Local de Alba de Tormes, los bomberos de la Diputación de Salamanca, Protección Civil, un helicóptero medicalizado de Sacyl, una ambulancia con soporte vital básico y personal médico.
Este lunes, se incorporaron, además, miembros del Seprona, bomberos de Béjar y Salamanca, la Policía Local de Salamanca así como un dron de la Benemérita para reforzar la búsqueda aérea. Además, se sumaron los especialistas del Grupo de Actividades Subacuáticas (GEAS) de la Guardia Civil procedentes de Valdemoro (Madrid) y Valladolid para llevar a cabo un minucioso rastreo del fondo fluvial.
El operativo está coordinado desde el Puesto de Mando Avanzado por el comandante jefe de operaciones de la Comandancia de Salamanca. La Confederación Hidrográfica del Duero ha informado a ICAL de que en ese tramo del Tormes no existen zonas habilitadas oficialmente para el baño.
La Guardia Civil mantiene el llamamiento a la ciudadanía para que, en caso de observar cualquier indicio en la zona, lo comuniquen de inmediato a través del teléfono 062.