La Junta de Castilla y León ya prohíbe en los menús que se ofrecen en los comedores de los colegios públicos la bollería industrial, así como los productos ultraprocesados o con azúcares añadidos, como recoge el Gobierno en su decreto para regular la alimentación en todos los centros educativos. Así lo destacó hoy el portavoz de la Junta, Carlos Fernández Carriedo, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno, en la que precisó que en todas sus “líneas de trabajo siempre está la oferta de raciones de pescado, de carne y de legumbre”.
Carlos Fernández Carriedo defendió la calidad de los comedores escolares en los centros públicos de la Comunidad, que “se basa en la variedad” y donde se preparan y ofrecen todos los días 50 menús diferentes elaborador por nutricionistas, para afrontar todas las intolerancias posibles de los alumnos, informa Ical.
El consejero portavoz también precisó que esa oferta sobre al base de un sector argoalimentrario de calidad, se ofrece en 538 comedores de centro públicos, en los que cada día comen 51.600 alumnos, de los que 31.000 lo hacen con algún tipo de beca, el 60 por ciento del total, cuando en España solo se beneficia el 35 por ciento. Asimismo, se congratuló porque la mayor parte de ellos, comen gratis con su beca, y el resto, “los menos”, dijo, pagan de media por menú 4,5 euros, frente a los cinco en España.
Facilitamos una alimentación saludable y adaptada a las intolerancias, que llega a casi 52.000 alumnos, con un porcentaje gratuidad que duplica la media española y a un menor precio”, resumió.