El Defensor del Pueblo constata que la ley de Castilla y León no recoge la violencia vicaria aunque tiene encaje

La Junta avanza que la nueva norma prevé incluir otros tipos de violencia como la sufrida por un menor por parte de su progenitor para causar dolor a la madre.
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Violencia de género


La vigente ley contra la violencia de género en Castilla y León no contiene menciones expresas a la violencia vicaria como una manifestación de violencia hacia la mujer, constata el Defensor del Pueblo, Ángel Gabilondo, en el informe registrado el pasado viernes, 22 de noviembre, en las Cortes Generales sobre la “Violencia vicaria de género. Las otras víctimas”, coincidiendo con el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, que se conmemora cada 25 de noviembre.


En el informe, consultado por Ical, no obstante, se indica que sí cabría en la norma ese tipo de violencia mediante su encaje en el precepto que, a modo de cierre, admite de manera genérica otras manifestaciones de la violencia de género distintas a las que previamente ha enumerado.


Así, tras mencionar diversas manifestaciones concretas de la violencia sobre la mujer (física, psicológica, sexual), añade: "Cualquier otra forma de violencia que lesione o sea susceptible de lesionar la dignidad, la integridad o la libertad de las mujeres basada en la pertenencia al sexo femenino”.


Precisamente, la Junta tiene el texto de actualización de la Ley contra la Violencia de Género en Castilla y León, que data de 2010, que prevé remitir al Consejo Consultivo para solicitar el preceptivo dictamen y remitirla a las Cortes a principio de 2025, según avanzó hoy el presidente Fernández Mañueco.


En el texto, se recogen nuevas “formas de ejercerla y sufrir” la violencia, como la violencia vicaria dirigida a hijos, familiares o allegados; la digital a través del uso de las tecnologías; o la violencia de segundo orden ejercida contra las personas que apoyan a las víctimas.