El vicepresidente de la Junta de Castilla y León, Juan García-Gallardo, se dirigió hoy a los jóvenes para afirmar que tienen “todo” el apoyo económico y social para formar una familia en la Comunidad, sostuvo que “la principal razón por la que caen las tasas de natalidad es cultural” y aseguró que Vox lo combate “con mensajes en positivo” y medidas que empiezan a dar sus frutos con un repunte de nacimientos en el último año.
García-Gallardo, que cerró este martes las comparecencias en las Cortes para exponer la gestión de los miembros de la Junta en la mitad de la legislatura, se detuvo en uno de los ejes de acción de Vox en el Ejecutivo de la Comunidad, como la perspectiva de familia, sobre la que relató las medidas puestas en marcha para asentar población.
“Somos conscientes de que unos cientos de euros de ayuda no son una solución definitiva al problema, porque en la baja natalidad de Castilla y León, España y Europa influyen muchos factores”, argumentó, entre ellos recalcó “el persistente ataque cultural a la familia”.
El vicepresidente manifestó que “todo el mundo occidental está inmerso en un declive demográfico que empieza, por fin, a preocupar a cada día más gente”, aunque rechazó que el modo de combatir la despoblación sea a través de la inmigración y apostó por “primar” el impulso a la natalidad.
“Los jóvenes deben saber que tienen un gobierno regional que protege a las familias y apoya la natalidad. Nuestro objetivo político es que nadie en Castilla y León renuncie a formar una familia por motivos económicos”, manifestó.
Así, incidió en que “quien se anime a formar una familia en Castilla y León debe saber que va a tener un gobierno regional apoyando, con incentivos, con medidas de conciliación, con facilidades para la adquisición de vivienda”. “Y que vamos a perseverar en ese camino. Porque una sociedad sin niños es una sociedad sin futuro. Porque una sociedad sin familias fuertes es una sociedad condenada al fracaso”, remató.
En tal sentido, se refirió al programa de actuaciones de apoyo a la familia que aborda todas sus necesidades y realidades: apoyo a la natalidad; conciliación de la vida familiar y laboral; apoyo a los menores en toda su etapa educativa -por primera vez ahora desde los 0-3 años hasta la universidad; ayuda para la adquisición de la primera vivienda.
Se refirió al Bono Nacimiento, con 7.182 concedidos en 2023, a dar más facilidades a las familias numerosas, que son 34.139, o un decreto que se prepara para liberarles de la obligación de solicitar el reconocimiento cada cinco años, pues, a partir de ahora, esta condición se mantendrá hasta que el hijo menor cumpla 26 años.
Así, afirmó que el conjunto de medidas en beneficio de las familias y de apoyo a natalidad les permite afirmar que Castilla y León es la comunidad autónoma española que lidera los beneficios fiscales en favor de las familias en España, y es la comunidad de España con las deducciones más altas por nacimiento o adopción.
En el año 2023, las ayudas por natalidad, familia numerosa y cuidado de hijos han beneficiado a 12.000 familias en Castilla y León, con una media por beneficiario de 831 euros, y se han dejado de percibir por parte de la Junta 9,85 millones de euros, en deducciones fiscales, detalló.
Precisamente, afirmó que la presión fiscal ha disminuido un once por ciento, según la memoria tributaria de Hacienda de Castilla y León, y recordó que han concedido beneficios fiscales por importe de 674 millones de euros.
Según manifestó, este año se han empezado a ver los resultados, ya que Castilla y León sumó 4.291 nacimientos en el primer cuatrimestre de 2024, un 6,79 por ciento de incremento respecto al mismo periodo en 2023, y frente al 1,24 de repunte nacional.
También, defendió que el Pacto Social por las Familias de Castilla y León y el Pacto por la Conciliación ayudarán a seguir avanzando en la conciliación, que calificó de “prioritario” para la Junta.
España vaciada
García-Gallardo afirmó que “Castilla y León no es la España vaciada”, sino “la España de las oportunidades”, advirtió de que “quien no lo vea así, será mejor que se dedique a otra cosa”, y avisó de que “la despoblación no se va a resolver con derrotismo ni con victimismo”. “Mucho menos con descalificaciones”, para defender la política fiscal que sitúa a la Comunidad entre las tres autonomías con un sistema fiscal más favorable para el medio rural.
En su extensa intervención -leyó 75 folios-, desgranó medidas de estos dos años en todas las materias de la Junta, desde las económicas hasta las relativas a servicios sociales, junto a las de las consejerías que gestiona Vox, como las de Agricultura, Industria y Cultura, sin olvidar las acciones como representante de Castilla y León en el Comité de las Regiones de Europa.
Tras desgranar las medidas en todas las materias, afirmó que Vox contribuye a un “gobierno sólido que aporta estabilidad política” a la Comunidad, más allá de “los fuegos de artificio, las maniobras de distracción, el ruido de la oposición y diferencias superadas con esfuerzo entre socios de gobierno con prioridades que, en algunos aspectos, son distintas”.
“Aquí seguiré mientras me sienta con energías y capacidad para afrontar las misiones que nos han sido encomendadas”, proclamó al final de su intervención, en la que aseguró que, “con humildad y sin pecar de soberbia”, en estos dos años de ha producido un cambio en Castilla y León.
Como conclusión, afirmó que “Castilla y León va por buen camino”. “Algunos construyeron su relato de oposición sobre mentiras y vaticinios agoreros. Esos anuncios de retrocesos en derechos, de destrucción de libertades y de caos, no se han materializado: no se han hecho realidad”, zanjó.
“Nuestra ambición en este gobierno no es otra que trabajar para fortalecer la libertad, la seguridad y la prosperidad de esta tierra. Y todo el que quiera sumar esfuerzos en esa tarea, está invitado a remar”, remató.