Los agentes encontraron a los implicados alterados y manifestaron, junto con otros testigos, que el vecino del piso superior había descendido a su domicilio, golpeando la puerta y haciendo aspavientos con dos cuchillos mientras les amenazaba. Los agentes accedieron al piso superior y localizaron a esta persona en el rellano, en una actitud desafiante y sin querer colaborar con los uniformados, escondiendo sus manos en todo momento.
Tras pedirle que depusiera su actitud, se le invitó a mostrar sus manos. Ante la resistencia a ser registrado, en busca de posibles armas, y ante los hechos descritos por los implicados fue detenido. En dependencias policiales fue identificado, ya que no presentada documentación alguna, y se verificó que en su historial constaban denuncias por ruidos y molestias en el domicilio.