España pide a Bruselas más flexibilidad y menos burocracia en la PAC
El Gobierno español presentó este lunes diferentes propuestas a la Comisión Europea y al resto de estados miembros para flexibilizar los requisitos de la Política Agraria Común (PAC) y reducir el nivel de burocracia en el sector de la agricultura, especialmente de las pequeñas explotaciones. “Todos los agricultores y ganaderos esperan una respuesta europea efectiva”, dijo el ministro de Agricultura, Luis Planas, en la entrada del Consejo de Agricultura de la Unión Europea que se celebró este lunes en Bruselas.
Una de las propuestas que presentó España y que se recoge en un documento del Ejecutivo, al cual ha tenido acceso Ical, es que se deroguen dos normativas que afectarían a los agricultores castellanos y leoneses. Concretamente, Moncloa pide acabar con la obligación de rotación de las tierras de cultivo de más de 10 hectáreas, de forma que después de tres años se hayan rotado todas las parcelas, y la de diversificación de cultivos según el tamaño de la explotación.
También quiere poner fin a la normativa europea que exige que se dedique un porcentaje mínimo de la superficie agrícola a superficies o elementos no productivos (que sirven de hábitat para polinizadores o fauna auxiliar, mejoran la biodiversidad, etc.) o a zonas de barbecho, franjas de protección de cauces, lindes forestales o elementos del paisaje (muros de piedra, árboles, charcas, etc).
Según el documento presentado por el Gobierno, si se derogan estas dos normativas, “los agricultores de maíz de Castilla y León, por ejemplo, podrían sembrar toda la superficie de este cereal, sin tener que dedicar una parte a rotación o a barbecho”. Además, para los casos que optan por un cultivo secundario para la rotación, España propone eliminar la obligación de tener que haber usado ese cultivo secundario en los dos años anteriores, y poder contar con una solución permanente en todo el período.
En este sentido, vuelve a poner de ejemplo los agricultores de maíz de Castilla y León, que “suelen cosechar muy tarde y normalmente no les da tiempo a sembrar una leguminosa como cultivo secundario”. Para ello tendrían que usar un maíz de ciclo corto, pero tiene menos rendimiento. “Por eso lo que se pide es que les valga con usar solo un año el cultivo secundario. De esta forma podrían cultivar solamente maíz cuatro campañas seguidas, siendo solo la última con ciclo corto para poder poner justo a continuación una leguminosa como cultivo secundario”, apunta el planteamiento de España.
Por otro lado, el Gobierno español pidió que los pequeños agricultores no estén sometidos a control de la condicionalidad de las ayudas de la PAC, ya que supone mucha carga administrativa para la poca superficie que representan. “En España, eximir de estos controles a los agricultores de menos de 10 ha beneficiaría a 345.000 de los más de 620.000 beneficiarios de la PAC, lo que supone el 55,6 por ciento del total”, calcula el gobierno español.
Además, España también propuso al resto de socios europeos y a Bruselas permitir el laboreo vertical del suelo (arar sin voltear la tierra) en los rastrojos, sobre todo si ha llovido después de la cosecha y han proliferado malas hierbas. Y también que se permita el abonado en verde (arar enterrando las hojas y tallos frescos de determinadas plantas de forma que sirvan de nutriente para el cultivo posterior), ya que esto contribuye a proteger contra la erosión y reciclar nutrientes. “Esta es una petición recurrente de agricultores de diferentes comunidades autónomas”, constata el documento.
Más allá de la propuesta escrita, Planas también pidió a Bruselas que “acelere” y haga una propuesta antes del final de esta legislatura europea, que se acaba este junio, y se negocie rápidamente entre los estados miembros (Consejo) y el Parlamento Europeo. “Los agricultores están preocupados por la aplicación de la nueva PAC”, insistió el ministro de Agricultura.