El Fondo Tecnológico de Caja Rural de Zamora obtiene una rentabilidad media del 8,55%
El Fondo de inversión Rural Tecnológico Renta Variable de Caja Rural de Zamora figura entre los productos con una rentabilidad media anual, en los últimos 20 años, superior al ocho por ciento. En concreto, muestra una rentabilidad media anual del 8,55 por ciento desde 2004, frente a una rentabilidad media anual del 2,06 del conjunto de los fondos de inversión españoles durante estas dos décadas, según un comunicado de la entidad financiera, que sitúa este producto entre los nueve mejores fondos.
Al igual que la gran banca, las cajas rurales “no se quedan atrás en el sector de productos de inversión” y llegan a ser parte de la competencia directa a la que se “enfrentan las grandes gestoras de fondos bancarios españolas”. En lo que va de año, las cajas rurales han incrementado su volumen de comercialización en productos de inversión, “hecho que en cierta medida se debe al impulso en la venta de fondos entre sus clientes”.
Tanto las grandes entidades bancarias españolas como las cajas rurales han apostado por aumentar la variedad de productos de inversión, “proporcionando una oferta de productos para todos sus potenciales clientes”.
Negocio
El Grupo Caja Rural cuenta con la sociedad de inversión colectiva Gescooperativo. Durante este último año, esta firma ha conseguido superar los 8.000 millones de euros de patrimonio bajo gestión, lo que significa un incremento acumulado de más del 16 por ciento en 2023.
La sociedad se sitúa por delante de Bankinter y Sabadell en la venta de fondos de inversión, “gracias a la segmentación de público y estrategia que esta sigue, dirigiéndose a clientes de sesgo conservador”.
Clientes potenciales
Las cajas rurales “han sabido adaptar” su oferta de fondos a todos los perfiles de sus clientes, incluso “los más osados”, como el Rural Renta Variable Internacional FI, “no solo a un público de edad avanzada y con un perfil conservador, manteniendo la cercanía y atención personalizada, rasgos corporativos con los que se definen las cajas rurales”.
A diferencia de la gran banca, las cajas rurales, con menor volumen gestionado que los grandes bancos en fondos de inversión, “han establecido una estrategia de negocio diferente a su competencia, sabiendo aprovechar la fuerte demanda que tienen en algunos territorios donde la gran banca se ha retirado, destacando las zonas rurales”.