La Diócesis desea “muchos años” de pastor de la iglesia zamorana a monseñor Valera Sánchez, tras cuatro décadas como sacerdote
La diócesis de Zamora deseó hoy “muchos años” como pastor de la iglesia zamorana al obispo, Fernando Valera, quien cumple hoy cuatro décadas como sacerdote, desde que monseñor Javier Azagra le impuso las manos en su diócesis natal de Cartagena (Murcia), el 18 de septiembre de 1983.
“Deseamos que don Fernando continúe muchos años realizando su tarea como padre y pastor en la iglesia de Zamora, con ilusión y celo apostólico. Dios quiera que, en este nuevo tiempo, nos siga confirmando en la fe, sosteniendo en la esperanza cristiana y estimulando en la caridad”, desearon fuentes del Obispado de Zamora en un comunicado.
Fernando Valera, quien se hizo cargo de la diócesis de Zamora el 30 de octubre de 2020, fue coadjutor de la parroquia de Nuestra Señora del Rosario de la Unión y miembro del equipo pastoral encargado de la parroquia de San Nicolás de Bari del Estrecho, de San Ginés de Cartagena (1983-1984); coadjutor de la parroquia de Nuestra Señora de la Asunción de Molina de Segura (1984-1990), párroco de San Antonio de Padua de Mazarrón (1990-1991) y sacerdote misionero fidei donum en el Alto de Bolivia (1991-1992).
Además, fue párroco de Nuestra Señora de Loreto de Algezares (Murcia) (1994-1997), párroco in solidum de Nuestra Señora de la Asunción de Moratalla y de San Bartolomé de El Sabinar, de la Virgen de la Rogativa y de San Juan y Béjar (1997-1998); párroco de Santiago Apóstol de Lorquí (2000-2004); párroco de Nuestra Señora del Rosario de Puente Tocinos (Murcia) y arcipreste de Murcia-Nordeste (2004-2005).
También fue párroco de la Purísima de Javalí Nuevo (Murcia) y delegado diocesano para el X Congreso Eucarístico Nacional de Toledo (2005-2011), vicario episcopal de la Zona Suburbana I (2010-2019) y profesor de Metodología Científica en el Centro de Estudios Teológico Pastorales San Fulgencio de Murcia (1988-1991).