Francisco Guarido, elegido por tercer mandato consecutivo alcalde de Zamora por Izquierda Unida

El regidor municipal revalida el cargo con el apoyo de los 10 concejales de IU y los 3 del PSOE
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Pleno 5



Francisco Guarido ha sido elegido por tercera vez consecutiva alcalde de Zamora, en la sesión constituyente de la nueva Corporación Municipal, que ha tenido lugar esta tarde en el Ayuntamiento tras la formación de la Mesa de Edad integrada por los concejales electos de Izquierda Unida, Laura Rivera y Pablo Novo, ante un nutrido número de invitados entre familiares de los munícipes y representantes institucionales.


Tras el acto de promesa o juramento ante un ejemplar de la Constitución los 25 ediles han tomado posesión de su cargo, al tiempo que han recibido la correspondiente medalla corporativa que les acredita como representantes electos del Ayuntamiento de Zamora para los próximos cuatro años. Diez de ellos se estrenan en una Corporación que a partir de ahora contará con dos partidos nuevos: Zamora Si y Vox, con dos ediles cada uno.


Posteriormente se produjo la elección de alcalde mediante votación nominal y secreta en la que Francisco Guarido obtuvo la mayoría absoluta con el apoyo de los 10 concejales de Izquierda Unida y los 3 del PSOE mientras que los ediles del resto de los grupos votaron a su candidato.


Aún en recuperación tras una intervención quirúrgica por un desprendimiento de retina, Guarido no leyó ningún discurso de investidura, pero sí quiso agradecer el trabajo de la Corporación saliente y dar la bienvenida a la nueva para, después, remarcar su propósito para este nuevo mandato: el de "seguir trabajando con honestidad por la ciudad”, una integridad que, resaltó, “he percibido también en la oposición durante los 8 años que he sido alcalde y en los 16 años en los que fui concejal”. Extendió su agradecimiento al resto de las instituciones públicas, con las que “hemos trabajado por el bien de esta provincia con respeto, a pesar de tener ideologías muy distintas”; y al secretario del Ayuntamiento, José María García Sánchez, que culmina su etapa en la Casa de las Panaderas para jubilarse, tras haber ejercido con diferentes Corporaciones y “trabajado con lealtad con todas ellas”. El regidor municipal recordó que tras 16 años como edil de la oposición y 8 como alcalde, le toca seguir para superar el número de años que estuvo en el Consistorio “nuestro buen amigo Luis Vicente Pastor”. “Si logro acabar el mandato, si tengo salud para ello, le superaré en cuatro meses”, bromeó el alcalde.


Recordó que el Ayuntamiento de hoy es muy distinto al que se encontró como alcalde en el año 2015, “y para bien”, matizó, para rememorar después aquella concentración espontánea en la Plaza Mayor cuando Izquierda Unida logró hacerse con la Alcaldía de Zamora por primera vez. “Eso solo se logra una vez en la vida”, recalcó emocionado Guarido, que prometió “seguir trabajando con humildad por este Ayuntamiento”.


Confesó que esta ha sido una campaña difícil tras su operación de urgencia por un desprendimiento de retina, una intervención de la que sigue recuperándose y que le ha impedido leer el discurso, y agradeció la “cortesía” con la que se han comportado todos los candidatos que aspiraban a la Alcaldía. Se mostró convencido de que la Casa de las Panaderas es “ejemplo de lo que debe ser la política: una actividad noble que sirve para mejorar la vida de los ciudadanos y para que progrese la ciudad, desde posiciones políticas muy diferentes pero siempre con respeto al adversario”. Entre sus deseos, concluir en este nuevo mandato proyectos como el arreglo de las travesías, el Mercado de Abastos o la reforma del Puente de Piedra tras unos años complicados, “con dos de pandemia y una subida de precios posterior que ha puesto en dificultades a todas las administraciones”. “La pandemia nos puso a prueba a los políticos y las cosas salieron bastante bien”, destacó, tras recordar que de un día para otro, “todos nos tuvimos que ir para casa y descubrimos lo que era el teletrabajo, una palabra de la que casi ni habíamos oído hablar”.


Francisco Guarido tuvo también palabras de agradecimiento para el grupo de Izquierda Unida porque está convencido de que “hemos sabido gobernar con mayoría, pero también sabemos pactar y consensuar con otros grupos” para acentuar que hay que “adaptarse a las circunstancias de cada momento”. En este punto, el alcalde esperó que dentro de un mes esté ya configurada la estructura de Gobierno Municipal y lanzó su oferta al PSOE de formar parte del nuevo equipo, aunque matizó que “cualquier posibilidad es válida porque lo importante es trabajar por esta ciudad”.


Guarido dio por concluida la sesión con un deseo personal: “Espero que esté sea mi último discurso, de verdad”, aunque inmediatamente tiró de ironía para recordar que “eso también lo dije hace 8 años”. Reiteró que la política es una “actividad noble” en la que “no se viene a hacer amigos, pero si se hacen mejor”, y dejó “abierto” su despacho para que tanto los concejales, “los de un lado y los de otro” acudan a él si precisan ayuda. “Así que amigos, todos a trabajar por Zamora”, concluyó el regidor municipal entre aplausos.