Así lo indicó Abascal en rueda de prensa desde la sede de Vox, donde señaló que, tras los resultados de las elecciones municipales y autonómicas en las que su partido puede ser decisivo en seis comunidades para formar gobierno junto al PP y en diferentes ayuntamientos, hoy “no es el día de las exigencias”.
Según Abascal, hoy es el día “de la mano tendida”. En este sentido, señaló que ha habido un partido que “ha ganado en muchas regiones y ayuntamientos y que no tiene mayoría para gobernar” por tanto, es este partido, el PP el que “tiene que decidir si está dispuesto a construir una alternativa con nosotros o si va a optar por otro camino”.
“Nuestra mano está tendida”, comentó, al tiempo que incidió en que hoy “no es día de exigencias, ni de ultimátum ni de palabras gruesas”. Además, quiso saber “si vamos a contar al otro lado”, haciendo alusión al partido de Feijóo, “con respeto, altura de miras, responsabilidad y con patriotismo”.
Preguntado sobre si el adelanto electoral puede influir en los posibles pactos con el PP, Abascal apuntó que “no lo sabemos, pero lo sabremos pronto” y explicó que en esta campaña el PP ha ofrecido “un pacto” con el PSOE y Vox está “a la espera” con la “mano tendida” dispuesto a construir la “alternativa que hemos defendido en las elecciones”.
En relación con estos pactos, Abascal, como ya hizo durante la campaña electoral para el 28-M, repitió que en las posibles negociaciones hará “respetar” los intereses de sus votantes y que nadie piense que su partido va a hacer “un regalo”. Además, dijo con “mucha claridad” que Vox no es “el coche escoba de nadie”.