El propietario, junto con los policías a los que había avisado mediante llamada a la Sala del 091, accedieron al interior del domicilio observando una familia de cuatro personas, dos de ellas menores de edad, que se habían instalado en su casa. En un primer momento, el denunciante, echó en falta una televisión, dos ordenadores portátiles, un módem, una bicicleta, libros, varios DVD y ropa de su pertenencia.
La Policía Nacional procedió a la detención del varón y dejó a su pareja sentimental a cargo de los menores. Los agentes lograron recuperar parte de los enseres sustraídos, haciendo entrega al propietario de los mismos. Al detenido le figuran varios antecedentes policiales por otros Cuerpos y Fuerzas de Seguridad por delitos contra el patrimonio.
La Policía Nacional alerta a los ciudadanos sobre los delitos que son cometidos en domicilios donde los inquilinos están ausentes durante largos periodos de tiempo, ya sea con objeto de producir robos o de su ocupación.