Zamora no olvida: se cumplen 63 años de la tragedia de Ribadelago
Cada 9 de enero, Zamora y Ribadelago se acuerdan de las víctimas de la Catástrofe de Ribadelago. 63 años después, sigue intacto el recuerdo de esos aquellas 144 personas que no sobreviviereon, un recuerdo que cada año resurge de las aguas del lago, como si nu hubiese pasado el tiempo.
El 9 de enero de 1959, la presa de Vega de Tera sufrió un rebentón, provocado por la rapidez de su construcción y los materiales de baja calidad utilizados. Fueron ocho millones de metros cúbicos de agua los que sucumbieron aquel pueblo que se encontraba a 8 kilómetros de la presa, ocho millones de metros cúbicos que se llevaron por delante 144 vidas, aunque fueron más las personas que aquella madrugada lo perdieron todo.
La Catástrofe de Ribadelago es uno de los mayores desastres vividos en la provincia de Zamora. Fueron 500 personas las que lograron sobrevivir, aunque a duras penas, puesto que las ayudas no llegaron hasta el día siguiente. Esas mismas personas que fueron recolocadas artificialmente en un pueblo ubicado a unos kilómetros de Ribadelago, que por aquel entonces se denominaría como Ribadelago de Franco (hoy Ribadelago Nuevo).
En Ribadelago viven actualmente poco más de 30 personas, suficientes para mantener vivo el recuerdo de aquellos 144 vecinos, de los que solo 28 cuerpos pudieron ser recuperados.
Zamora recuerda todavía como esta catástrofe se cerró con propaganda y promesas que nunca llegaron, se cerró con recaudaciones benéficas que prácticamente las familias de las víctimas no vieron y se cerró con una condena a los responsbales, que más tarde fueron indultados y absueltos.