“Quien quiera invertir aquí va a tener unas condiciones favorables. Desde suelo industrial a nuevas tecnologías, así como una fiscalidad moderada e inteligente que permita gestionar el sector empresarial en condiciones más competitivas que otras comunidades autónomas”, resumió el presidente, invitando también a apostar por una “simplificación administrativa” para que estas entidades puedan instalarse en suelo castellano y leonés “con mayor rapidez”.
El posible aterrizaje de alguna de esta plantas de fabricación de baterías fue anunciado en Los Desayunos de Ical por el portavoz y consejero de Economía y Hacienda de la Junta, Carlos Fernández Carriedo, quien reseñó que la oferta de Castilla y León es “incomparable” dentro del sector de la automoción en referencia a otras autonomías, porque es la “líder” tanto en fabricación de vehículos como en componentes, y está en un “eje estratégico que puede hacer de punta de compás para al abastecimiento de todo el sector en España y cuenta con profesionales muy cualificados”.