El pasado 14 de agosto, día en el que se declaró el incendio, Cobadú se puso en contacto con los ganaderos y cooperativas de la zona afectada para “ayudar en lo que fuera posible” y, tras una “intensa semana de gestiones”, se preparó el envío de pienso y forraje, organizado gracias a la “comunicación directa” entre los ganaderos y el equipo de la Cooperativa Bajo Duero.
“El envío se hará de forma ordenada y contando con la logística de la cooperativa. El reparto, una vez reunidos los ganaderos y teniendo las rutas claras, se hará efectivo la próxima semana”, precisaron.
El montante de alimentación animal llegará “directamente” a las granjas, naves y silos de los ganaderos que resultaron afectados por el siniestro, según anotaron las mismas fuentes.