Son varios los indicios que invitan a pensar que la reactivación del turismo en la provincia, y concretamente, en Toro, es una realidad tras más de un año de pandemia. Por ejemplo, el aumento de reservas en las visitas guiadas que organiza el consistorio, quien ha tomado nota de este impulso del sector a las puertas del verano e incrementará la plantilla de la Oficina de Turismo de la ciudad.
Esta tendrá cuatro empleados más, que serán contratados gracias a dos subvenciones otorgadas por la Junta de Castilla y León y por la Diputación de Zamora. Estos trabajadores serán necesarios para gestionar el aumento de consultas que previsiblemente registrará la oficina en los meses veraniegos.