La Coordinadora de la España Vaciada presenta en el Congreso 101 medidas que se pueden aplicar ya

Se trata de un documento consensuado por 80 plataformas con acciones concretas para reequilibrar el territorio ante el “abandono” de las instituciones.

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Pueblo España vaciada


80 organizaciones integradas en la Coordinadora de la España Vaciada presentaron este martes en el Congreso de los Diputados un documento llamado “Modelo de Desarrollo” con el que quieren promover el “necesario reequilibrio territorial de España”, compuesto por 101 medidas reales que "se pueden poner en marcha ya".


MEDIDAS Y ACCIONES

El diputado de Teruel Existe, Tomás Guitarte, apadrinó el acto junto a los representantes de la Coordinadora nacida de la famosa marcha que recorrió las calles de Madrid el pasado 29 de marzo de 2019. Ellos presentaron este plan “concreado por la sociedad civil” que recoge 101 propuestas, medidas y acciones concretas para revertir la despoblación de forma efectiva, ya que se ha elaborado “de abajo a arriba” por más de 140 personas conocedoras de la problemática territorial, así como de la carencia de recursos que padecen determinados territorios. Está dividido en 8 secciones, que son las mesas desde donde han trabajado los ciudadanos las diferentes temáticas y ámbitos. 


“La diferencia con otros planes es que este ‘Modelo de Desarrollo’ recoge 101 medidas concretas que se pueden poner en marcha desde ya” indicó Antonio Sanz, uno de los representantes de las organizaciones que acudió al Congreso, en concreto de Teruel Existe. 


Con esa perspectiva, este documento aborda cuestiones como un pacto de estado contra la despoblación y por el reequilibrio territorial que esté dotado de “un mecanismo de financiación estable y una inversión asegurada y permanente con independencia de quién esté en el gobierno” alegó Guitarte. 


INFRAESTRUCTURAS Y SERVICIOS

Un plan denominado 100/30/30 para garantizar las infraestructuras de comunicación físicas y digitales y la calidad en los servicios, (100 MB simétricos de acceso a internet, 30 km a una autovía y 30 minutos de desplazamiento a servicios básicos); medidas para asentar población desde el ámbito del bienestar; mantenimiento y creación de servicios en el medio rural; propuestas sobre infraestructuras para vertebrar la España Vaciada con el resto del país; fomento de la economía circular; digitalización prioritaria para acabar de verdad con la brecha digital; mantenimiento y puesta en valor de nuestro patrimonio natural y cultural; plan urgente de vivienda en el medio rural; y desconcentración de las distintas administraciones. 


“Ser pocos no resta derechos” pronunció Sanz durante su intervención, una frase que se ha convertido ya en lema de las marchas que vienen realizando desde la Coordinadora de la España Vaciada. Un término que Guitarte insistió en utilizar porque “fueron las política del Estado, erróneas, las que llevaron a que esos territorios se vaciaran”. Es el denominador común que dijeron recorre todos estos municipios y comarcas, el “persistente abandono de las instituciones” tanto en cuanto a inversiones en infraestructuras como a la falta de oportunidades. 


Esas son las principales reivindicaciones según resumió Milagros Herreros, representante de la Asociación Cuenca Ahora: la dotación de infraestructuras de comunicación de calidad, tanto físicas como digitales, la creación de oportunidades de empleo para poder atraer a los jóvenes al medio rural y poder crear un proyecto vital, con servicios públicos básicos de calidad, oferta de ocio y cultural, y que haya una fiscalidad diferenciada. También una atención especial a la mujer rural como pilar de la estructura de estos municipios. Una perspectiva de género que recorra de manera transversal ese pacto de estado. 


EL COMIENZO DE UN NUEVO PROCESO

Para la Coordinadora de la España Vaciada este no es el último paso, sino el comienzo de un nuevo proceso en el que intentarán sumar la complicidad de todas las administraciones e instituciones porque, afirman, “este es un problema de todos que debería ser prioritario en las políticas públicas”, y para algunos territorios “ya no queda tiempo”.