El puente medieval de Castrogonzalo (Zamora) sobre el río Esla se reabre mañana al tráfico, aunque con medidas cautelares de seguridad

El tráfico local y agrícola se mantenía desviado desde el 10 de marzo por un carril de la A-6
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Castro



El puente medieval que salva el cauce del río Esla a su paso por Castrogonzalo (Zamora) se reabrirá al tráfico mañana, miércoles, 2 de diciembre, según anunciaron fuentes del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, si bien, tras la fuerte avenida de agua registrada a finales del pasado mes de octubre, la apertura se hará con varias medidas cautelares para garantizar la seguridad hasta que se terminen completamente los trabajos, que se reanudarán durante la primavera del próximo año.


Las medidas cautelares consisten en limitar la velocidad de circulación a 20 kilómetros por hora y en limitar la carga máxima autorizada a 30 toneladas, con la correspondiente señalización de obras.

Las avenidas registradas en el río Esla en diciembre de 2019 provocaron ciertos problemas de socavación en algunas pilas del puente, que se hicieron patentes a finales de febrero de este año, por lo que el tráfico por el puente se cortó de inmediato y se desvió por un carril segregado de la autovía A-6 en sentido a La Coruña, entre los puntos kilométricos 257,770 y 258,575.

De esta forma, al ser posible reabrir el puente de Castrogonzalo al tráfico, se retirará el próximo jueves, 3 de diciembre, la barrera de hormigón que protege el actual desvío por la A-6, según anunciaron las mismas fuentes.

Valor histórico y patrimonial

El tramo de sillería del puente de Castrogonzalo, construido entre los siglos XVII y XVIII, tiene un alto valor histórico y patrimonial, con casi 134 metros de longitud y ocho vanos cuyas luces varían desde los 8,20 hasta los 11,50 metros, constituidos por bóvedas de cañón con tímpanos macizos. Tanto las bóvedas como las pilas sobre las que apoyan y los estribos son de sillería, con anchuras de pilas entre cuatro y cinco metros.

La reparación incluye la monitorización e instrumentación del puente para un control exhaustivo y continuo de los movimientos, el relleno parcial del cauce mediante ataguías de tierra para acceder a las pilas y poder realizar su reparación y el apeo de los arcos correspondientes a las pilas más afectadas desde la plataforma.

Igualmente, contempla el realce de las cimentaciones mediante encepados perimetrales a las pilas, la limpieza y rejuntado de piedras en paramentos y bóvedas y el refuerzo en un estribo y cinco pilas.

La próxima primavera, se actuará en la homogenización de rigideces del tratamiento del terreno realizado en el año 2016 con el recalce que se está efectuando actualmente en el puente y se terminará el refuerzo y la consolidación de la cimentación de la pila 6.