La obligatoriedad de utilizar, a partir de julio, un software de facturación compatible con el sistema Verifactu convierte el uso de herramientas profesionales en una pieza clave para que las empresas puedan adaptarse correctamente a la nueva normativa fiscal.
La tramitación de la Orden Ministerial correspondiente y, del Reglamento que desarrolla la Ley que establece la obligatoriedad de facturación electrónica para empresas y autónomos, sigue pendiente de desarrollo.