SEO/Birdlife recuerda que los incendios en Castilla y León "afectan gravemente a áreas protegidas y espacios de interés comunitario"

El fuego amenaza los últimos reductos para el urogallo en Asturias y León.
|

 10MAX202508702808


La Sociedad Española de Ornitología ‘SEO/Birdlife’ recordó hoy que la oleada de incendios que asola al noroeste de la península ibérica desde hace más de diez días “está afectando gravemente a áreas protegidas y espacios de interés comunitario” en las autonomías de Asturias y Castilla y León, como el Parque Nacional de Picos de Europa, y los Parques Naturales de Somiedo, de Redes, de Ponga y de Fuentes del Narcea, Degaña e Ibias.  



Se trata, como recuerda SEO/Birdlife en un comunicado remitido a Ical, de espacios protegidos de la red regional que están incluidos en la Red Natura 2000 y declarados como Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA), Zona de Especial Conservación (ZEC) y Áreas Importantes para la Conservación de las Aves y la Biodiversidad, además de ser Reservas de la Biosfera. 


“En otras palabras, se trata de espacios todos ellos importantes por contener un número significativo de especies particulares de flora y fauna, o de sitios irremplazables por su integridad ecológica por lo que deben preservarse”, apuntan desde la ONG naturalista.


Por ello, SEO/BirdLife hace hincapié en que “en un escenario de cambio climático como el actual, la política forestal debe dar un giro” para “dejar de permitir el uso del fuego como una herramienta generalizada de gestión de pastos y retomar los acotamientos al pastoreo en áreas incendiadas”.


También piden prohibir las practicas cinegéticas en terrenos quemados y apostar por las especies forestales autóctonas y “no por los cultivos forestales de especies exóticas como los eucaliptos”.


La ONG, que recuerda que el fuego amenaza los últimos reductos para el urogallo, reclama así una estrategia estatal de prevención y restauración basada en el conocimiento, integrada territorialmente y respaldada por recursos adecuados, que dé respuestas a los retos climáticos y de gestión que amenazan nuestro futuro. 


“España debe liderar con el ejemplo: no basta con apagar el fuego, debe reconstruirse la naturaleza con criterios claros de conectividad ecológica, priorizando Red Natura 2000, bosques autóctonos y hábitats vulnerables”, concluyen.