Las familias de hijos con ACI y TDAH o autismo demandan atención académica y emocional en las aulas de Castilla y León

Las Asociación de Altas Capacidades de Soria ha contado con la presencia de la experta Anna Roig.
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Aula


Las familias con Altas Capacidades Intelectuales (ACI) demandan atención académica y emocional para sus  hijos, ya que los retos de los progenitores con hijos neurotípicos no son los mismos que deben afrontar ellos.


Con motivo del Día Internacional de las Altas Capacidades Intelectuales, que se celebró ayer. la Asociación de Altas Capacidades de Soria (ACSO) organizó la jornada ‘Luces y sombras de la doble excepcionalidad. Una definición’, un evento que busca dar luz a una realidad desconocida para gran parte de la sociedad: la existencia de personas con altas capacidades intelectuales que, al mismo tiempo, enfrentan dificultades de aprendizaje o trastornos del neurodesarrollo.


La directora del proyecto Zebra, Anna Roig, fue la encargada de impartir la charla con la que se intentó dar soporte a las familias sorianas. En su opinión, es necesario atender el aburrimiento que soportan estos alumnos en las aulas  y también proporcionar a las familias y al profesorado las herramientas suficientes para hacer frente a la “intensidad emocional” que estos niños padecen. 


"Los niños con ACI y TDAH o Trastorno de Espectro Autista tienen un procesamiento de las emociones y de los sentidos diferentes a otros niños, entonces necesitan también que se les entienda y se les proporcione una inteligencia a nivel emocional. Esto también es la asignatura pendiente”, resaltó.


Roig, destacó a Ical, que la ley obliga a las administraciones a adaptaciones del curriculo para esos niños y realizar los programas de detección, pero todavía está en una fase “muy incipiente”. “Puede incluso ocurrir que un niño que viva en Andalucía y tenga reconocidas sus altas capacidades se mueva a Madrid y no se las reconozca. Necesitamos más unión y sobre todo más apoyo también institucional”, resaltó.


La responsable del proyecto Zebra, que realiza las pruebas de ACI en Madrid, Barcelona y Vitoria, subrayó la necesidad de que las administraciones atiendan la doble excepcionalidad que se da cuando las altas capacidades aparecen combinadas, por así decirlo, con  otra condición o problema o dificultad. 


"La idea es ver qué pasa cuando ocurre esto, cuando tenemos estos perfiles más complejos que no son sólo de alta capacidad y hasta qué punto tienen dificultades o facilidades”, resaltó para indicar que no se puede generalizar porque hay tantos perfiles como personas en el mundo.


Anna Roig aclaró que tener altas capacidades no es saberlo todo, y subrayó que la sociedad, en general, piensa que son “superhéroes”, pero tienen sus problemas y carencias de conocimientos de distintas áreas. "Los talentos pueden ser en distintas áreas del conocimiento pero no por ello eres talentoso en todo”.


"Ser poco empático o sociable es un rasgo que solemos tener la gente con altas capacidades, pero también puede ocurrir que se tenga una empatía muy elevada. Pero cuando pasa esto y es tan pronunciado que puede abrumarte y tiendes a anularlo. Parecemos muy inadaptados socialmente porque no sabemos lidiar con ciertas situaciones por esa carga de empatía”.


Por último, señaló que en EEUU y Reino Unido hay programas específicos para personas con altas capacidades o rendimientos, y señaló la necesidad de que exista una mayor dedicación a estos perfiles.