La Audiencia Provincial de Zamora absolvió a un hombre de 42 años al que se atribuyeron inicialmente sendos delitos de estafa y falsedad documental, al considerar que “no ha quedado acreditado” que el acusado remitiera un correo electrónico, simulando ser una empresa constructora, ni que se apropiara de más de 60.000 euros como resultado de esa acción.
Los hechos se produjeron el 19 de junio de 2020, cuando una empresa recibió un correo electrónico en el que el remitente, haciéndose pasar por una constructora que tenía pendiente unos cobros, comunicaba que iban a cambiar su número de cuenta habitual y que, por ello, los servicios prestados debían ser abonados en una cuenta nueva, según recoge la sentencia.
Como sistema de verificación, envió a la empresa un certificado bancario que había sido confeccionado a tal efecto y una factura. La empresa, en la creencia de que hacía un pago en la nueva cuenta corriente, abonó el 30 de junio de 2020 la cantidad de 61.653,52 euros.
El acusado, que cuenta con antecedentes penales y fue condenado por sentencia firme en 2018, por el Juzgado de lo Penal de Zamora a seis meses de prisión por delito de estafa, se encuentra actualmente en libertad provisional, según refleja la sentencia.