Dormitienda cierra sus puertas en Zamora en un abrir y cerrar de ojos. El establecimiento ubicado en la esquina de la Avenida Tres Cruces con Amargura cierras sus puertas. Un local que anteriormente estuvo ocupado por Granier, vuelve de nuevo a estar disponible.
Se desconocen las causas del cierre, pero de nuevo otra tienda que abandona las calles de Zamora. Una ciudad que cada día suma nuevos locales cerrados y el color va desapareciendo en las calles. Es una pena que se siga desangrando y no haya solución para frenar la situación. Pese a que los políticos insisten en las posibilidades de la provincia de Zamora y anunciar el polígono de Monfarracinos, la situación real es otra.
Quién no quiera verla, es porque no pasea por la capital. Una ciudad donde el cartel de se alquila, se vende en los locales se ha convertido en algo común.