La operación se inició a primeros de año, cuando agentes de la Guardia Civil de Valdebotoa-Badajoz interceptaron un vehículo que circulaba por vías de comunicación dentro del término municipal de La Garrovilla. Una vez identificados sus cuatro ocupantes, tres hombres y una mujer con numerosos antecedentes por delitos de robos, llevaron a cabo la inspección del turismo y comprobaron que transportaban numerosos objetos de los que no podían acreditar su legitima procedencia.
El análisis de los objetos y posteriores pesquisas llevadas a cabo por el Área de Investigación de la Guardia Civil de Badajoz con unidades de la Guardia Civil de Cáceres, resultó fundamental para averiguar que, en efecto, los enseres fueron sustraídos del interior de dos viviendas del municipio de Villar del Pedroso, en la provincia de Cáceres. Además, gracias a ello pudieron implicar a los identificados en otros robos en segundas viviendas de los municipios cacereños de Valdecasas de Tajo, Garvín y Carrascalejo.
Los presuntos autores llevaban a cabo los robos tras seleccionar previamente inmuebles utilizados como segundas viviendas. Se desplazaban en vehículos hasta el lugar y comprobaban la ausencia de moradores. Para acceder a los inmuebles y apoderarse de toda clase de objetos, enseres, antigüedades e incluso productos de alimentación, forzaban los bombines de las cerraduras, que posteriormente colocaban para retrasar la detección de los robos por parte de sus propietarios.
Con la vinculación en las acciones delictivas de estos vecinos de Badajoz y Torremayor con un amplio historial delictivo, los guardias civiles establecieron dispositivos con el objetivo de dar con ellos. Un mes después, lograron identificarlos cuando circulaban con el mismo turismo, propiedad de uno de ellos, por la carretera N-523, que une Cáceres y Badajoz.
Una vez inspeccionado el coche, los agentes comprobaron que transportaban material supuestamente de procedencia ilícita. Tras las gestiones oportunas y colaboración con unidades de la Guardia Civil de Salamanca, comprobaron que estos objetos fueron sustraídos, con el mismo modus operandi, en dos viviendas salmantinas de Peñacaballera. Los objetos fueron reconocidos posteriormente por sus legítimos propietarios.
Ante estos hechos y con las pruebas incriminatorias, la Guardia Civil detuvo a tres de ellos e intervino el vehículo y las herramientas utilizadas para la comisión de los robos. El cuarto integrante del grupo fue localizado y detenido el pasado jueves 23 de mayo en la capital pacense.
A todos ellos, se le instruyeron diligencias por su implicación en los 12 robos perpetrados en viviendas cacereñas y salmantinas, y fueron puestos a disposición de los Juzgados de Instrucción de Badajoz. Con el desarrollo de las investigaciones, la Guardia Civil no descarta la implicación de los ahora detenidos en otros hechos similares cometidos en Extremadura.