Según informó este martes la Policía Nacional en un comunicado recogido por Ical, a pesar de tranquilizarla durante los primeros momentos, la joven continuó manifestando que nadie podía ayudarla en la infinidad de problemas que padecía en su vida, motivo suficiente, desde su punto de vista, para haber tomado la decisión de tirarse por el puente.
La rápida intervención policial consiguió abortar la firme intención de la joven, ya que los policías pudieron sujetarla por la cintura y los brazos en el preciso instante en el cual se iba a dejar caer por el hueco existente entre el hormigón del viaducto y el quitamiedos.
Una vez asegurada en el asfalto de la calzada, la joven fue trasladada por los servicios médicos al Complejo Asistencial Universitario de Salamanca, donde quedó ingresada. La Policía informó de que la joven, en el momento del traslado, se encontraba físicamente en buen estado y no presentaba lesión alguna.