Safari Madrid recibe dos rinocerontes blancos sureños dentro del programa de conservación europeo

​Con estas nuevas incorporaciones, Safari Madrid se incorpora al Plan Europeo de Conservación de Rinoceronte blanco de forma directa.
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Foto Safari Madrid Aldea del Fresno (3)


Safari Madrid, en Aldea del Fresno, ha recibido dos ejemplares de rinocerontes blancos sureños provenientes del programa de conservación europeo. Con estos animales, Safari Madrid se incorpora al Plan Europeo de Conservación de Rinoceronte blanco.


El pasado día 31 de enero en kolrmander (Suecia) a las 9:00 de la mañana se inició como todos los días el entrenamiento voluntario del rinoceronte y en especial del joven Amady y su habituación a la caja de transporte. Con una diferencia, y es que ese día se embarcaría en un viaje de más de 3.200 km. El rinoceronte entró en la caja de forma completamente voluntaria a la llamada de su cuidadora Kate como decenas de veces había hecho.


Esto se entrena con el objetivo de que no sea necesario la anestesia ni la sedación para introducirles en la caja de transporte. El rinoceronte entra de forma voluntaria en busca de unos mimos y alguna "chuche"; poco a poco se van cerrando las puertas e incluso se les acostumbra a mover la caja por el aire, para que nada les resulte extraño. Cada día un poquito más tiempo, cada día un poco más independiente de su grupo, exactamente igual que como sucede en la naturaleza.


Pero ese día finalmente empezaría para el su independencia y el inicio de su vida "adulta". Como era de esperar entró de forma voluntaria y en cuestión de 15 minutos estaba completamente cargado en ese tráiler especialmente adaptado para el transporte de rinocerontes.


UNA MIGRACIÓN SINGULAR

Ese mismo día durante la noche Amady y la empresa de transporte especializada en animales salvajes Ekipa llegaron al Zoo de Copenhague (Dinamarca).


A la mañana siguiente repitieron el mismo proceso, pero esta vez con el que se ha convertido en su hermano “Moloto” el nombre le hace justicia... un ejemplar de casi 2.000 kilos que todavía no ha cumplido los 3 años. Pusieron rumbo a Madrid.


El día 3 a las 8:00 de la mañana llegaron a Safari Madrid, en Aldea del Fresno. Todos los cuidadores se encontraban expectantes por conocer a las dos nuevas súper estrellas del parque.


Ya estaba todo preparado... la grúa, la gente, las nuevas instalaciones, perfectamente climatizadas a 21 grados, solo faltaba el momento crítico la descarga de esas enormes cajas de transporte (más de dos metros de altas, dos metros de anchas y casi 5 de largas) en total 5.000 kilos más el propio animal moviéndose dentro deseoso de terminar su viaje, como esos niños al llegar a la playa después de varias horas de coche.


Los nervios estaban a flor de piel. Finalmente, los técnicos de Safari Madrid descargaron en primer lugar a Moloto. Jennifer la veterinaria del Parque coordinó el trabajo: “le enseñamos la que a partir de ahora y hasta que esté listo para tener su propio grupo de hembras, será su instalación, parecía encantarle la idea. Estaba totalmente adaptada cumpliendo los mejores estándares para su aclimatación y adaptación”.


En el caso de Moloto la necesidad de un nuevo lugar y rápido era patente ya que por su tamaño el nuevo macho reproductor "Danés" le empezaba a considerar un rival, cuando este jovencito solo es un niño muy grande.


Con Amady todo fue mucho más sencillo abrir la puerta y salir, como un jovencito deseoso de explorar y conocer su instalación. Dos días después “nos dimos cuenta de que estaban completamente adaptados” apunta la veterinaria de Safari.


Finalmente se decidió que era el momento de que conocieran su instalación exterior, el calor y sol de España. Salieron con determinación y corrieron por su espacio al aire libre descubriendo el entorno.

La importancia de que esta unión salga bien es vital. Las cinco especies de rinoceronte que nos quedan es tan en un peligro crítico de extinción, debido principalmente a la caza furtiva en busca de esos cuernos a los cuales las creencias más absurdas otorgan poderes curativos.


CONSERVAR UNA ESPECIE ÚNICA

El deber que tenemos es conservar estos animales para futuras generaciones y conservar su medio ambiente. Necesitan nuestra ayuda y de ahí la importancia de los programas de conservación fuera de África. Safari Madrid colabora con el programa que se creó para la cría de especies en peligro de extinción EEP y en particular el que protege a esta especie. El mayor grupo de expertos en esta especie colabora entre sí para garantizar la supervivencia de estos animales dirigiendo un ambicioso programa de reproducción, con todos los individuos en las mejores reservas de Europa, para que críen entre sí, garantizando una representación del 100% de los animales, y garantizando la variabilidad genética.


Si la concienciación y educación llega demasiado tarde y finalmente estos animales se extinguen, se podrán reintroducir los animales en libertad y recuperar la especie. Esto ya ha sucedido con varias especies, que se extinguieron en sus hábitats y gracias a centros como Safari Madrid y a los programas EEP se han podido reintroducir y ahora hay varios miles de ejemplares en libertad. Casos como el Orix Cimitarra o el Caballo de przewalski.


Esperemos que no lleguemos nunca a ver el final de estos animales en naturaleza. Ojalá hubieran existido estos programas con el Mamut o el tigre de Tasmania o el elefante europeo o el tigre de dientes de sable.