Las pesquisas arrancaron de la mano del equipo Roca de la Guardia Civil el pasado 21 de junio, después de que los agentes del puesto de Castronuño tramitasen dos denuncias por la comisión de los robos, que habrían sucedido el 19 de diciembre y el 15 de junio. Las investigaciones rápidamente se centraron en una de las vecinas de las viviendas afectadas, ahora detenida, que entre los meses de diciembre y junio habría efectuado cinco ventas de joyas, por un valor cercano a los 8.000 euros.
A partir de las fotografía tomadas por los establecimientos a las joyas vendidas por la mujer, los agentes pudieron comprobar que coincidían con las sustraídas en los domicilios. Los investigadores también averiguaron que en los hechos actuó el otro detenido, como autor de los mismos. Las diligencias instruidas ya han sido puestas a disposición del Juzgado de Guardia de Medina del Campo.