Seis franceses confunden Budapest con Bucarest y se pierden el partido de su selección

"Creíamos que eran aficionados húngaros que iban al partido y los hemos seguido, pensando que como eran de la ciudad conocían el camino al estadio", dijo uno de los franceses
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Seis aficionados franceses confundieron Budapest con Bucarest y viajaron a la capital rumana en vez de a la húngara, adonde habrían querido llegar para ver el Francia-Hungría del grupo F de la Eurocopa que se disputó el pasado sábado. El anecdótico viaje ha sido recogido por el diario rumano Jurnalul National.



Los seis se dieron cuenta de su error el mismo sábado después de aterrizar y tomar un autobús hacia el centro de Bucarest, mientras bebían cerveza con aficionados ucranianos que se daban cita para presenciar el encuentro que este lunes enfrentaba a su selección con la de Austria, correspondiente al grupo C.


"¿Venís de Kiev?", les preguntó el periodista de Jurnalul National, a lo que los aficionados respondieron que no, que se habían equivocado de sede de la Eurocopa y tenían entradas para el Hungría-Francia que iba a jugarse en unas horas en el Puskas Arena de la capital húngara.



Una vez conscientes de su error, los seis seguidores de los 'bleus' decidieron quedarse en Bucarest hasta este miércoles, cuando Francia se enfrentó en Budapest a Portugal en el último partido de la fase de grupos.



Como los de Didier Deschamps han quedado primeros del grupo F, disputarán los octavos de final (frente a Suiza) el 28 de junio en Bucarest. En este caso, los despistados galos podrán comprar una entrada para ver, esta vez sí, a Francia en directo en esta Eurocopa.


"Tiene gracia que sea la selección nacional la que venga donde estamos nosotros", comentó irónicamente Manuel, uno de los aficionados, sobre el desenlace del entuerto. Confundir Budapest con Bucarest no fue el único error de estos franceses que trabajan juntos en una empresa de informática en su infortunado viaje al Este.


Ni las banderas rumanas o el idioma que hablaban los funcionarios en el aeropuerto hicieron caer en la cuenta de que habían llegado al sitio equivocado a estos aficionados, que además pensaron que los hinchas ucranianos que agitaban banderas de su país eran seguidores del rival de Francia.


"Creíamos que eran aficionados húngaros que iban al partido y los hemos seguido, pensando que como eran de la ciudad conocían el camino al estadio", dijo uno de los franceses sobre cómo llegaron al casco antiguo de Bucarest. "Tenemos que aprender más sobre Europa", reconoció uno de los integrantes del grupo.