Sacyl abonará 20.000 euros a una paciente por el coste de un tratamiento de rodilla en una clínica privada por una actuación ineficaz
Una mujer de 27 años se sometió a en cinco intervenciones quirúrgicas entre 2011 y 2017, hasta el punto que se le reconoció la discapacidad en 2018.
El Juzgado de lo social número 1 de Valladolid condenó a Sacyl al abono 19.713 Euros, en concepto de reintegro de gastos a un paciente por el tratamiento de una rodilla suministrado en una clínica privada de Madrid en 2018 después de una actuación ineficaz.
M.G.M. denunció a Sacyl, a través de los Servicios Jurídicos de la Asociación El Defensor del Paciente, cuando comenzó a presentar inestabilidad en la rodilla, que le obligó a someterse en cinco ocasiones a diferentes intervenciones quirúrgicas, entre 2011 y 2017, en la sanidad pública de Valladolid, con el consiguiente tratamiento de rehabilitación y analgésicos. Pese a ello, la inestabilidad en la paciente de 27 años se agravó con la rotura de ligamentos y caídas. M. G. M intentó ser derivada a centros especializados dentro del sistema público sanitario sin conseguirlo y sin que le dieran una motivación para el rechazo. Según un comunicado de la asociación, Sacyl solo ofreció, una y otra vez, la misma intervención que había resultado antes “infructuosa” en reiteradas ocasiones.
“Mientras tanto, pasó casi siete años de sufrimiento, caídas y pérdida de movilidad. Toda su juventud dependiendo de dos muletas y una ortesis mecánica de pantorrilla a muslo”, precisó. Hasta el punto, que en mayo de 2018 se le reconoció una discapacidad.
LA SENTENCIA
La sentencia reconoce que “desde 2011 hasta 2017 su calidad de vida ha sido claramente deficitaria, que el sistema utilizado por la sanidad pública no resultó efectivo, no fue debidamente atendida”, máxime teniendo en cuenta que fue el propio facultativo que le atendía en el Sacyl, quien recomendó asistencia externa tras las sucesivas intervenciones quirúrgicas; y que la intervención que se le propuso en el 2017 en el Sacyl era una más de las ya intentadas, sin esperanzas de evolución. Se reconoce que el tratamiento que recibió la paciente en la Clínica Centro, fue la única solución, ante la ineficaz intervención de los servicios públicos.
Y tanto es así que la intervención ha sido un éxito a todos los efectos ya que, en la actualidad, ha abandonado las muletas y la ortesis mecánica, de pantorrilla a muslo con la que llevaba desde el año 2013 con carácter continuado que la limitaba para todas las actividades.